Capítulo 19

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Camila Pov

-Buen día-Entré a al edificio de la empresa. Tifanny me miró con atención.

-Buen día, Mila-Respondió de vuelta. Entré al ascensor y marqué el septimo piso y las puertas se cerraron. Acomodé mi blazer mejor, sin dejar que se notara el escote. No es como si no me gustara llevarlo, no tendría sentido alguno que llevara mi camisa sin prender los últimos botones, pero cuando trabajas con hombres ellos suelen creer que solo por tener un culo y un par de tetas pueden hacer lo que quieran contigo. Tal vez otras chicas sí se dejen sobrepasar por ellos, pero yo no. Caminé por el largo pasillo hasta la antepenultima puerta, la correspondiente a la sección económica en la que trabajo, abrí las puerta con decisión  encontrando a los mismos simios de todos los lunes.

-Buen día-Hablé alto y claro haciendo que sus risas se detuvieran.

-Buen día, jefa-Christian subió los pies sobre el escritorio y se recostó sobre su silla.

-Buen día-Dijeron los otros dos.

-Hazme un favor y baja los pies del escritorio. Ya eres un hombre, ¿No lo crees?-Él obedeció.

-Y veo que tú también eres una mujer estupenda-Recorrió mi cuerpo con la mirada.

-Como sea, a trabajar, se acabó el recreo, señores-Christian es de esos hombres que creen que por ser guapos y atléticos tienen a todas las chicas de rodillas deseando por poder hacer algo más que rezar con él. Además, cree que tiene el derecho a rebajar a una mujer, es chistoso ver cómo es que todavía no se ha dado cuenta de que soy su jefa por ser superior a él. Richard tomó su lugar mientras que simulaba hacer algo más que mirar páginas de juegos para matar el tiempo.

-Karla-Jake se acercó a mi escritorio con desesperación.

-Camila-Corregí.

-Perdón, Camila-La dí una leve sonrisa-Terminé de recopilar las ganancias totales de cada sede-Dijo con un tono algo orgulloso por su trabajo.

-Gracias Jake, puedes seguir con lo tuyo.

-Gracias, Camila-Algo que había tomado costumbre con ellos era no dejar que utilizaran apodos conmigo. No es que no me guste relacionarme con compañeros de trabajo, pero con el tiempo he aprendido a que si dejas que machitos te den aunque sea el apodo que todos utilizan contigo, dejarás que puedan verte como inferior, ya que el igual no existe para ellos.

Son el tipo de hombres que les calienta tener una jefa, por el simple hecho de ser mujer, y si consiguen que esa mujer tome confianza con ellos, será eternamente inferiorizada. Yo no seré una de ellas. Aun creen, desde el primer día que he sido su jefa, que muero por ellos. Están demasiado equivocados, yo solo quiero a una persona en mi vida, y esa es Lauren. No hay hombre, o incluso mujer, que pueda reemplazarla.

Tomé mi bolso y saqué mi celular y carpetas de él. Prendí mi computadora y puse mi contraseña desbloqueándola, por cierto, es la fecha que cumplimos un año de noviazgo con mi mujer. De inmediato me comencé a dedicar a resolver el tema de los sueldos para fin de mes, o aunque sea adelantarlo, quiero intentar no tener tanto trabajo esta vez.

La pantalla de mi celular se iluminó mostrando una notificación haciendo referencia a un mensaje. Sonreí y desbloqueé la pantalla. "Ten un buen día, Camz", no importa si es el mismo mensaje todos los días, realmente me gusta leerlo a diario. "Tú también, jaguar, Te amo", contesté y bloqueé nuevamente la pantalla.

Miré por encima del monitor dando una vista panoramica de la oficina. Suspiré cansada. El único que está trabajando realmente es Jake, el pobre hombre cree que si cumple con todo lo que le pido como un perro le prestaré el tipo de atención que él quiere. Christian está matando el tiempo con su celular con el que claramente no utiliza para trabajar y Richard...maldita sea, Richard sigue tomando café para evitar si quiera hacer algo. Se supone que estoy determinando el sueldo de esta gente porque son eficientes, pero todo lo contrario, y si lo hago mal por rencor obviamente tendré un problema. Me levanté de mi asiento para estar más cómoda.

Recuérdame [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora