Recuérdame [CAMREN]

Capítulo 23

Lauren Pov

-¿Una niña?-Pregunté confundida-¿Qué hace una niña a estas horas despiertas?

-Podría preguntarte lo mismo-Volvió a ver hacia el asiento donde estaba la pequeña "Espía".

-Yo no soy una niña.

-Tienes el alma de una.

-Ja, ¿Qué?

-Tú no te has visto cuando te traigo arroz con leche.

-Es que es arroz con leche, Camz, ¿Cómo no emocionarse?

-Ay dios-Besó la comisura de mis labios.

-No.

-¿No qué?

-Si me vas a besar hazlo bien, sino lo haré yo.

-Umm...-Puso su dedo en el mentón como si estuviese pensando-No, mejor no. No lo mereces.

-¿Cómo que no lo merezco?-Hice un puchero mientras le seguía el juego.

-No, no me merezco una esposa como tú-Sonreí.

-Cierra la boca, yo no te merezco a tí-La tomé de las mejillas y la besé. Al parecer un pequeño duende tiró de la ropa de Camila llamando su atención. Esta se separó y miró detrás suyo.

-Mira a quién tenemos aquí, Lauren-Se corrió un poco dejandome ver a la niña de la que hablaba anteriormente.

-Hola pequeña-Dije en calma. La niña llevaba un cuadernito en su mano junto con una lapicera rosada.

-Hola señoras-Dijo algo tímida.

-¿Qué pasó pequeña?

-En mi escuela me pidieron que buscará mujeres hermosas y que las hiciera firmar un autógrafo.

-¿Nos consideras hermosas?-Ella asintió aun algo tímida-Bien, te daremos nuestro autógrafo, ¿Te gusta la idea, Laur?

-Me parece genial-La pequeña estiró su bracito con el cuaderno y la lapicera pasandomelo. Lo tomé y desplegué la mesita del asiento delantero-¿Cómo te llamas?

-Olivia.

-Tienes un nombre precioso, Olivia.

-Gracias, lo escogió mi mami.

-Pues tu mamá escoge muy buenos nombres-Le firme a la pequeña el cuaderno con mi propia firma y debajo anoté mi nombre. Luego se lo pasé a Camila, quién hizo lo mismo para luego devolverle el cuadernito a la más chica.

-Díme Olivia, ¿Por qué no estás durmiendo?

-Es que no tengo sueño.

-Intenta dormir un poco, mañana estarás cansada sino.

-Es que no puedo, no sé porque.

-Intentalo, mañana estarás cansadas y tus padres se enojarán.

-Está bien, ¿Ustedes por qué están despiertas?

-Estamos leyendo.

-¿Cómo saben leer?-Reí por su ocurrencia.

-Aprendimos hace muchos, muchos años, en la primaria.

-Yo todavía no voy a primaria, mi mamá dice que es porque soy pequeña-Se cruzó de brazos enojada, sin duda parecía ser algo que le molestaba. Poco a poco notaba como iba perdiendo la timidez.