Capítulo 46

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Camila Pov

Treintinueve semanas

-Feliz cumpleaños, mi amor-Miré por el rabillo del ojo encontrándome con una Lauren en ropa interior.

-Gracias, mi Lolo-La tomé de la cintura y la besé.

-De nada. Siéntate en la cama-La miré confundida. Ella separó mis piernas y bajó mis shorts de pijama.

-Ahora no podemos-Bajó mi ropa interior y su aliento chocó contra mi sexo haciendo que una ola de calor me golpeara de inmediato.

-Tómame el tiempo, y veremos cuánto tardo en hacer que te corras. Supuestamente a una mujer le toma, en promedio, trece minutos y veinticinco segundos para poder tener un orgasmo-Cabe recalcar que sino fuera por el almohadón debajo de sus rodillas ya se hubiera levantado. La tomé de la barbilla y la miré.

-No es necesario que lo hagas.

-Anda, toma el cronómetro del celular. Esto es sólo un adelanto-Tomé mi celular e hice lo que ella me pidió. El cronómetro conenzó a andar y de igual manera su lengua comenzó a moverse por encima de mi sexo.

Mi respiración se entrecortaba cada vez más, tomé su cabello y lo hice una coleta. Sus bucles se enredaban entre mis dedos mientras. Su lengua hacía círculos encima de mi clítoris desesperandome.

Me miró con sus ojos verdes penetrantes y sentí su lengua en mi entrada. De inmedito mis parpados se cerraron y sentí su respiración nuevamente golpear contra mi sexo.

A los minutos sentí mi orgasmo llegar. Lamió todo mi centro dejandome limpia. Se levantó y paré el cronómetro. Le mostré la pantalla del celular.

-Ahí dice nueve minutos con treinta y dos segundos-Tomó su vestido rojo, dejándolo sobre la cama, y me quitó lo que me quedaba de pijama-A la ducha cumpleañera-Tomó mis prendas del suelo y la puso en el cesto de ropa sucia.

Me bañé y me puse un vestido pegado al cuerpo color marfil. Sequé mi cabello y lo planché. Salí del baño y fui hasta la habitación de Emily. Ella estaba concentrada buscando algo entre sus juguetes.

Cuando ella me vió corrió hacia mí y yo la tomé en brazos. Me rodeó con sus piernitas como un koala y se aferró a mi cuello. Acaricié su pelo y dejé un beso en su mejilla.

-Feliz cumpleaños, mami.

-Gracias, monita-Me separé de ella sin dejar de cargarla-¿Ya estás lista?

-Sí.

-Hoy vienen personas que quieren conocerte-Me miró insegura-¿Qué pasa?

-No.

-¿No quieres?-Negó-Tú solo tienes que decir "hola" y luego si no te agradan puedes irte.

-¿No tengo que dar un besito?

-Si tú no quieres, no tienes por qué hacerlo. Sólo debes saludar, aunque sea con la mano.

-Sí-Me tomó de las mejillas con dulzura mientras me miraba a los ojos-Te quiero, mami.

-Yo más-Le dí un beso en la punta de la nariz-Mucho más, pequeña.

-¿Cuántos cumples, mamá?

-Veintiocho.

-¿Y mamá cuántos tiene?

-Vientiocho también, pero en unos meses cumplirá veintinueve.

-Está bien, ¿Sele cuántos cumple?-Ya tenía un apodo para su hermanita. Cuando no la llamamos por su nombre, le apodamos Sel o Sele.

Recuérdame [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora