Recuérdame [CAMREN]

¡Mamá, Emily y Louis cerraron la puerta! pt.1

Selene 13
Emily 17
Lauren 41

Omnisciente Pov

-Cerraré la puerta-Louis se sentó en su cama de dos plazas.

-A tu mamá no le gusta eso.

-¿Y desde cuándo te preocupas por lo que dice mi mamá?

-Soy tu novio, debería preocuparme por ello.

-Veamos una película-Emily tomó el control remóto y prendió la televisión, puso netflix y comenzó a buscar algo interesante-¿Qué quieres ver?

Al lado de la misma habitación, Selene miraba su celular de una forma mal humorada. Pues siempre que Louis venía a casa, Heather lo hacía con él. Ella aun no se daba cuenta, pero tenía un crush con la prima de su cuñado. La rubia estaba enferma, así que esta vez, Louis había venido solo.

Luna, su pequeña gatita gris, deambulaba por toda su cama intentando llamar su atención. El animal la miró mal y se recostó en su regazo. La castaña soltó su teléfono y comenzó a acariciar el lomo de la gatita. Ella maulló y le dió un beso.

-Hay demasiado silencio, para que esté Louis en esta casa, ¿No lo crees?-Un maullido-Vamos por comida-La tomó en brazos y la gatita se quedó. Bajó las escaleras y fue a la cocina.

-¿Qué haces, Sel?-Lauren metió dinero en su bolso.

-Me alimento.

-¿De qué tienes hambre?

-Jugo y cereales.

-Bien. Me voy, necesito comprar algunas cosas, no hagan ninguna locura con tu hermana. Cualquier cosa me llamas.

-Ok-La mayor dejó un beso en su mejilla.

-Te amo, hasta dentro de un rato-Sin más cruzó la puerta y se fue.

La ojiverde buscó los cereales y un vaso de jugo y subió la escalera mientras que Luna la seguía, subiendo escalón por escalón, al todavía ser algo pequeña. A ella se le hizo algo raro, pero simplemente ignoró la puerta cerrada que su mamá odiaba.

Al otro lado de la puerta Emily y Louis se besaban de una manera bastante... rara para ellos. Emily había tomado el control y Louis luchaba por tenerlo en el beso. La chica estaba sentada en su regazo y sintió el bulto de su novio en su entrepierna.

-¿Tú quieres hacerlo?

-Sólo si tú estás segura-Ella quitó su blusa, quedándo sólo con un sostén de encaje, que había comprado a escondidas. La mirada de Louis se pegó a su pecho. Le dió una mirada pidiendo permiso y la acarició por encima de la tela. Sintió sus pezones erizarse y su centro mojarse a penas.

No era la primera vez que algo le exitaba, sabía que estaba pasando con su cuerpo, a pesar de no haber iniciado su vida sexual con otra persona. Louis quitó su playera para quedar en igualdad de condiciones. La rodeó con sus brazos y comenzó a intentar desabrochar el sostén.

Luego de por lo menos dos minutos luchando con él, Emily extendió sus brazos hacia atras y en un segundo ya lo había quitado. De repente la vergüenza le dió un golpe de realidad.

-Si no quieres no hay que hacerlo.

-Cállate, Styles-La tomó por la cintura acariciandola en esa zona. Se extendió para encontrar su cuello y comenzó a besarlo. La rubia se sentía en el cielo, una de las cosas que más le gustaban de Louis era cuando él besaba su cuello, eso la empapaba completa.

Se olvidó de sus pechos y se apoyó de sus hombros para no caerse. Acarició sus muslos por debajo de la falda rosada. Luego de unos segundos, decidió avanzar y llegó hasta su culo. Lo apretó y Emily gimió finalmente.

Levantó su barbilla y volvió a empezar un beso hambriento. Corrió con sus dedos la tanga, comprada ilegalmente, y pasó un dedo por sus pliegues. A sus madres no les gustaba la idea de que tuvieran ropa interior muy sexi, todavía las veían como su niña. La rubia sintió todo su cuerpo temblar, tanto que casi se cae al piso. Se agarró más fuertemente a sus hombros. Se separaron un segundo y ambos estaban demasiado exitados.

-¿Tienes condones?

-Creo que sí.

-Pues más te vale porque aquí hay no hay de los que necesitamos-Louis comenzó a revisar absolutamente todo bolsillo o lugar posible donde hubiera uno.

-Lo encontré.

-El mejor metodo anticonceptivo después de la abstinencia-Se lo dió y luego caminó hasta enfrente de ella. La rubia bajó sus pantalones, aun se sentía algo nerviosa, aunque no lo quisiera demostrar. Bajó su ropa interior y el miembro de su novio saltó casi pegándole en la cara.

-¿Cómo se pone?

-¿Me estás jodiendo hijo de tu puta madre? ¿Cómo no vas a saber?-El ojiazul se quedó en silencio. Emily rápidamente lo puso.

-¿Y ahora? ¿Me lo metó en la boca?-Él alzó los hombros. Tomó una respiración y lo hizo. Comenzó a chupar de todas las manera posibles que pasaban por su cabeza. Él gemía y sintió su centro palpitar, ahora sí que estaba algo asustada, jamas había llegado hasta ese punto. Se habían tocado mutuamente, sin necesidad de sacarse la ropa. Estuvo unos minutos así hasta que simplemente se cansó.

Selene se acercó sigilosa a la puerta, tomó su celular y marcó el número de su madre. A los tres tonos ella respondió.

-Hola, mi vida, ¿Qué pasó?

-Mamá, Emily y Louis cerraron la puerta-Suspiró.

-Bueno, déjalos.

-¡Pero, mamá!

-Nada de eso, ve a tu cuarto y quédate ahí. Yo me encargaré después.

-Está bien.

-En 15 minutos vuelvo, no te preocupes.

-Bye.

-Bye, hija-Colgó. La pequeña apegó su oreja a la puerta, se escuchaba que la cama se movia, y ruidos que no podía identificar. Ella no era tonta, y podía imaginar que estaba pasando dentro, pero también tenía miedo de abrir la puerta. Nadie quiere encontrar a su hermana con su novio en alguna posición rara.

La primera embestida dolió, tanto que Emily casi grita, pero mordió un cojín. La segunda también dolió, y ahí se dieron cuenta de que Emily había comenzado a sangrar y con eso mancharon las sábanas. Probablemente inventarían que le bajó o algo así. La tercera fue menos dolorosa y más placentera. Hasta que ya se transformó en puro placer.

No puedo decir que llegaron al orgasmo, o que no, porque ni siquiera ellos saben si llegaron o no. Lo que sí puedo decirles es que cuando Lauren llegó. Louis se metió al baño e hicieron como si nada hubiera pasado. Lauren confirmó sus sospechas, y pronto hablaría con su hija sobre ello.

Por si se lo preguntan, no. Louis no encontró el clítoris.