Capítulo 66

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Camila Pov

Un año más había pasado para nosotras y las niñas. Realmente se me llenan los ojos de lágrimas al pensar que Selene ya tiene tres y Emily siete, están enormes, y pensar que las conocí siendo prácticamente bebés.

Lauren había superado su trauma y los ataques de pánico con ayuda de medicación. Sí, eso era lo que la violación le había generado, hoy por hoy podía decirlo con todas las letras, pero aun le duele e incomoda hablar de ello. Ambas teníamos nuevos tatuajes.

Lauren decidió decicar uno a cada una. El nombre de Selene por arriba de la cicatriz de su cesárea, que podía verse cuando usaba traje de baño o ropa interior, el nombre de Emily en su antebrazo, al lado de corazón dedicado a mí, y por último unas alitas muy pequeñas en la parte de atrás de su brazo encima de su codo, en honor a nuestro último intento de tener un bebé.

Oficialmente ambas eramos infertiles, gracias al balazo mismo que la hizo perder a nuestro hijo le desgarró el útero, haciendo que perdiera su fertilidad. Podría recuperarla dentro de diez años, contando desde ese momento, pero ella decidió que ya no quería volver a intentarlo. Cuando estuviese completamente recuperada podría tener un embarazo, pero uno pasado los cuarenta ya consigo lleva riesgos, y gracias a la herida generada aunque estuviese en su mejor momento, también sería de riesgo. Cree que sólo será una perdida de tiempo, así que preferimos dejarlo así. Mi nuevo tatuaje son un sol y una luna, obviamente porque se complementan. Selene es mi luna y Emily mi Sol.

Louis y Emily seguían siendo los mejores amigos, pero ya no era el único. Abby se había unido a ellos, convirtiendose un poco en el mal tercio de su grupito, pero aun así estaba integrada.

-¿Estás bien, mi amor?-Lauren me tomó de la mano.

-Sí, Lolo-Ella se levantó y se sentó en mi regazo, la tomé de la cintura.

-Te amo-Me tomó de la barbilla y me besó. La acerqué aun más haciendo que chocara su centro con mi cintura, sin cortar el beso.

-¡Mamá! ¡Comida, por favor!-Me separé de ella. Me miró con sus mejillas algo enrrogecidas. Comencé a besar su cuello y ella tiró su cabeza hacia atrás dándome más espacio y...-¡Mamá!

-¡Va, Selene!-Suspiré.

-No te preocupes, ahora vamos-Se levató de mi regazo y entró a la casa por medio de la puerta corrediza que se conectaba con la cocina-comedor. Tomó a Selene en brazos que se quitó su chupete de la boca y habló.

-Comida.

-¿Palabras mágicas...?

-Ahora-Reboleó los ojos.

-"Por favor", princesita-Mi hija es armaga como su madre, pero sólo con la mayoría, con nosotras a veces.

-Ahora, Karla-Y como si estuviera hechizada caminé hasta la heladera y tomé un fruta de dentro. Corte la manzana en trocitos pequeños y se lo dí a mi esposa en un cuenco.

-Por dios, hasta tu hija te gobierna, Camila-Miró a Selene-¿Cómo se pide?

-Mami, ¿Me das comida, por favor?

-Ahora sí, ten-Le dió el cuenco y la bajó. Ella se sentó en la mesa y comenzó a comer.

-Lolo, creo que nos merecemos un descanso...

-Ya estamos de vacaciones con las niñas, Camila. El verano acabará más pronto de lo que te imaginas.

-Hablo de unas vacaciones nuestras, para nosotras dos.

-¿No crees que son muy pequeñas?

-No, para nada, posríamos charlarlo con tus padres y tener una semana de relajación.

-Podrían ser dos, una primero nosotras y luego con ellas.

-Podemos intentarlo-La besé de forma corta. El timbre nos interrumpió y Emily bajó corriendo por las escaleras.

-¡Es Louis! ¡Es Louis!

-Sí, bebé, seguramente sea él, cálmate-Me acerqué a la puerta y abrí encontrándome con los tres chicos bien vestidos.

-Hola, Mila-Saludó correcto el menor.

-Hola mini Lou, Emily está en la cocina.

-Gracias-Dijo antes de salir corriendo. Luego ambos saludaron y pasaron. Nos ayudaron con lo que faltaba de la mesa y yo terminé de cocinar el almuerzo, que básicamente se cocinó solo de igual manera.

-¿Qué cuentan?

-Nada interesante, rotaron a algunos empleados de sucursal así que ahora sí trabajo con gente decente.

-Que bien-Louis sonrió. Él era algo más reservado y tímido que Harry.

-¿Ustedes?

-Mi sobrina vendrá a vivir con nosotros.

-Eso es genial.

-Es hija de mi hermana Lottie, sólo que ella quiere quedarse en Inglaterra, pero quiere que ella estudie aquí, así que haremos un par de tramites para que yo sea su tutor.

-¿Cómo se llama?

-Heather, tiene dos años más que Selene.

-¿Tienes fotos?-Louis sacó su celular y buscó unos momentos, luego me lo extendió y miré la pantalla junto con Lauren. Era un niña rubia y de ojos celestes, muy parecida a su hermana, ya que la conocíamos por fotos, también es delgada. Selene venía tranquila con su cuenco en la mano lo dejó en una silla ya que no llegaba, yo lo puse en la mesa. Me agaché a su altura.

-Mira bebé, una posible nueva amiga-Selene miró el teléfono y simplemente quedó imnotizada, comenzó a tocar la pantalla haciendo zoom-Con cuidado que es de Louis-Luego de observar la foto un par de segundos le tiró un beso y se fué corriendo. Toda una galana como su madre de adolescente.

Recuérdame [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora