Habla Joana
Cris empezó a comerme los pechos. Yo estaba súper cachonda, no había nada más en el mundo que me pusiera más que Cris gimiendo. Coloqué mi cadera para que mi clítoris estuviera en contacto con el suyo y comencé a frotarme lentamente.
J-..aaaahhh....
Cris estaba empapada y yo súper lubricaba. Nos empezamos a enrollar muchísimo mientras ambas movíamos la cadera para frotarnos la una con la otra. Me estaba dando mucho placer. Nuestros gemidos se fundieron en uno solo.
J-..aaaah...aaaaahh...aaaaaah!!
C- aaaahhh... aaaahh... aaaaahhh!!
Empecé a hacérselo más intenso. Nuestros gemidos también se intensificaron. Cada vez follaba más fuerte a Cris y el cabezal de la cama empezó a dar golpes contra la pared. Nos daba igual. Seguí moviendo la cadera follando a mi mujer como nunca, estaba sudando,
No podíamos parar de gemir.
J-..cari... que me voy a correr...!!!! Aaaaahhhh!!! Aaaaaaaaahhh!!!!!
Cris no pudo ni contestarme, solo podía gemir cada vez más fuerte. Estaba súper cachonda y noté que me iba a correr así que la cogí de las muñecas empotrando su cuerpo contra el colchón y comencé a follarla al máximo hasta que no pudimos más. Tuve un gran orgasmo y Cris también. Noté como ella eyaculaba de nuevo empapando mi vagina. Me encantaba. No podía más. Me estiré a su lado con la respiración súper acelerada, el corazón me iba a mil por hora y estaba chorreando de sudor. Cris me acarició la cara y me besó.
C-.. cómo echaba de menos esto..
Yo estaba tan acelerada que no pude ni contestarla. Ella me sonrió y me besó.
C- te quiero amor
J-.. y.. y yo...
Cuando me recuperé me levanté de la cama y vi cómo habíamos dejado todo.
J- madre mía...
C- perdón 😳
J- jajajaja voy a por sábanas nuevas
Cris quitó las sábanas de la cama y pusimos unas nuevas. Luego nos volvimos a duchar porque nos hacía falta... cuando nos secamos nos estiramos en la cama y nos abrazamos desnudas. Me encantaba estar en contacto con su piel. Me quedé dormida acurrucada en su pecho.
