MEMORIA TRAICIONERA

CAPÍTULO 125 (Últimos capítulos)

Pero es que no me basta

Porque un amor bonito no se vende ni subasta

Me dejas como Jordan sin meter una canasta

Y si te lo repito es porque aún creo en ti

Y en mí

Rompe tus cadenas

Que este amor vale la pena

Déjate querer

Que amarte a medias no me basta

No me basta, mi amor

EL: Aunque no lo admita, hay una parte de mi que se niega a soltarte

ELLA: Nos costó mucho coincidir como para dejarnos ir tan pronto

- ¡Papiiiiii!

- ¿Qué hacías, mi vida?

- Estaba jugando. ¿Dónde estas?

- Estoy de viaje trabajando

- ¿Y cuando vuelves?

Roberto, desde la sala donde le tomaron declaración y con el móvil de su abogada, escuchaba emocionado la voz de Ada

- No se hija, espero que pronto

- ¿Me lo prometés?

- Si te lo prometo, y cuando vuelva nos iremos todo el día al parque y a comer muchísimos helados, ¿esta bien?

- Vale

- Ada....- dijo con la voz rota- te amo mucho hija

- Yo también papi

- Adiós mi amor, te llamaré siempre que pueda

Rober colgó y le dio el teléfono a su abogada que estaba tomando notas en una mesa

- Gracias

- Se te cae la baba con esa nena- dijo mirándolo mientras agarraba el móvil

- Es mi hija

Pablo y Marizza entraron después de despedir a la visita y vieron como Ada colgaba el teléfono

- ¿Con quien hablabas, mi amor?

La pequeña corrió hacia ellos gritando

- Con papá, ¡papá me ha llamado!

Marizza subió a Ada en brazos y miró a Pablo preocupada

A la mañana siguiente, Pablo y su inseparable Tomás se tomaban un café en una cafetería

- Y Pilar esta contenta en la nueva revista...

- Me alegro

- ¿Vos que vas a hacer ahora que Venus se ha trasladado?

- La verdad no se, pero me alegro mucho por Pilar, y que les vaya bien, al menos que le vaya bien a alguien- dijo alzando los hombros y pensando en sus situación

- ¿Eso quiere decir que las cosas con Marizza no terminan de arreglarse?

Pablo dio un suspiro profundo y echó la cabeza para atrás apoyándola en el respaldo de la silla