CAPÍTULO 3

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(Se le ha ocurrido olvidarte
Pero hace falta valor para olvidar
Cada momento es un mundo que en solo un segundo
Se puede derrumbar).1.

Tomás daba vueltas por toda la sala intentando entender la postura de su novia.

- Pero a mí me hace ilusión- reprochó el

- Ya sé, a mí también mi amor, pero es armar un bardo terrible. Imagínate cuando se encuentren sol y Mía o Marizza y Pablo después de cómo terminaron...-

Pilar se levantó de la silla y se acercó a su novio, le tocó la cara y volvió a decir.

- No sé, creo que antes de mandar las cartas deberíamos hablar con mi viejo-

Mientras en el apartamento de Mía, ésta recibía la visita de su media hermana.

- ¡Marizza!, ¡volviste!- exclamó Mía mientras la abrazaba contenta- ¿pero por cuánto esta vez? ¿por un mes? ¿por un día? –

- ¡Che! ¡Cortala!- exclamó Marizza paseándose por el saloncito del apartamento- No lo sé todavía- dijo observando la decoración de la casa- Sabia...reconcheto- susurró

- ¿Qué dijiste?- preguntó ingenua Mía

- Nada, ¿Dónde está Manu?-

Mía agachó la cabeza y se sentó en el sofá.

- Estará en el taller, lleno de grasa...- explicó pudorosa- Te juro que todavía no me acostumbré...-

En la redacción de la revista "Venus", Alejandra, la mujer de Pablo, hacia negocios con empresas del exterior.

- Perfecto, me reúno con ustedes en la semana, cuando lleguen a Buenos Aires- dijo con profesionalidad mientras hablaba por teléfono- No se van a arrepentir, "Venus" puede funcionar muy bien en el mercado internacional

A los segundos Pablo entró por la puerta sonriéndole a su mujer.

- Muy bien, les mando saludos, adiós-

Alejandra colgó el teléfono y se levantó para saludar a su marido.

- Llegaste temprano mi amor -

- Si, tenía cosas que hacer- contestó Pablo acariciándole su melena rubia

Después de un beso, se separaron dirigiéndose ambos hacia el escritorio

- Sabés vamos a tener una reunión con los del grupo Térez y si seguimos igual nos lanzan al exterior- explicó ilusionada Alejandra

- Qué bueno - dijo Pablo con algo menos de entusiasmo

- ¿Pasa algo? -

- No, no mi amor, nada -

La imagen de Marizza subiendo al taxi se le venía por segundos, la sensación de que podía estar a unas cuadras o de que tal vez hubiese sido un viaje exprés (de los que hacia ella habitualmente) no le dejaban vivir como venía haciendo esos ocho años.

(1)En seis años jamás la había tenido tan presente como ese día, tal vez porque la volvió a ver (aunque fuera de lejos), tal vez porque tenía la sensación de que quizás siguiese en Buenos Aires, o tal vez porque en realidad nunca la olvidó.

Mientras el pequeño de los Bustamante se hacia esas preguntas, un golpecito en la puerta le hizo volver a su ser.

- ¡Tommy! - exclamo contento Pablo dándole una cachetada cariñosa a su amigo

- Hola – dijo Tomás saludándolo y progresivamente haciéndolo con Alejandra

- ¿Cómo va?- preguntó Pablo curioso por la visita

- Nada, tenía un ratito y vine a saludar- dijo mientras Alejandra lo miraba dirigiéndose hasta ellos

- Les dejo que charlen, voy a hablar con el director de contenidos para el próximo número – dijo Alejandra excusándose y sonriéndoles amigablemente

Le dedicó una tierna caricia a Pablo y salió del despacho, Tomás miró a Pablo y curioseo un poco sobre la relación de su amigo con la empresaria.

- Se les ve bien-

Pablo sonrío exclamando: - ¡es divina!-

Tras esto Pablo se sentó en la silla de su mujer y le cedió la de enfrente a su amigo.

- ¿Qué tal todo por el elite?- preguntó Pablo mientras Tomás se sentaba

- Bueno...a Dunoff se le ocurrió una ideíta...

Mientras en el piso de Mía y Manuel, éste se encontraba con su amiga Marizza

- ¡Qué bueno que viniste! – exclamó abrazándola mientras Mía sonreía viendo el encuentro de los dos amigos- ¡Se te extrañaba por acá!-

- Sí, yo también los extrañé-.

Los tres tomaron asiento y siguieron comentando cosas de sus vidas

- Bueno... ¿y vos manu?, me tenés que mostrar ese taller ¡eh!- dijo Marizza dirigiéndose a Manu mientras Mía torcía la cabeza molesta con el trabajo de su novio

- Si...¡está buenísimo!- dijo el mexicano con ilusión

- No entiendo que le veis a estar lleno de grasa todo el día, no me entra en la cabeza mi amor- dijo Mía mientras Manuel le hacia una tierna caricia

Mientras tanto en el despacho de dirección de "Venus", Tomás le terminaba de contar a Pablo lo de la reunión.

- Pilar tiene razón – afirmó Pablo seguro de sus palabras- Es una boludez juntarnos a todos de nuevo, cada uno tiene su vida, para que volver atrás –

- Pablo, yo vine porque pensé que me ayudarías a convencer a Pilar, jamás pensé que me dirías esto – dijo Tomás algo desilusionado

- Ves, sabía que no venias a visitar amigo mío - dijo Pablo levantándose del sillón.

- ¿pero qué carajo te pasa? – preguntó Tomás algo molesto con su amigo y levantándose para ponerse a su altura- Han pasado ocho años, no tenés ilusión de reencontrarte con los chicos, con café, con mi primo, con Manu y con Mía que viven cerca de acá y ninguno da el paso para visitar al otro –

Pablo lo miraba sin entender el enfado de su amigo

- ¿Qué bicho te picó?, el colegio se terminó hace tiempo, ¿para qué remover todo otra vez Tommy ¿

– ¿No será que no te querés encontrar con Marizza? - Preguntó Tomás a su amigo dejando a éste inmovilizado y sin saber que contestar.

CONTINUARA...

1."luna de abril" de calle mística

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