MEMORIA TRAICIONERA

CAPÍTULO 115

Everybody knows my name now

But somethin' 'bout it still feels strange

Like lookin' in a mirror, tryna steady yourself

And seein' somebody else

And everything is not the same now

It feels like all our lives have changed

Maybe when I'm older, it'll all calm down

But it's killin' me now

Nada es del todo inesperado.

La desilusión es el precio que pagas por ilusionarte. Más yo siempre estoy preparado para el certero golpe de la realidad.

Cuida que la desilusión no te haga perder la esperanza,

Que la decepción jamás te desaliente,

Y que la traición no te haga nunca renunciar a al valiosa virtud de volver a confiar.

- ¿No es maravilloso? Preguntó Rober cortando el silencio que segundos antes se mantenía en el salón

- ¿Es eso verdad?- preguntó Pablo mirándola, sin percatarse de que había mas gente cenando con ellos

- ¿No vas a decir nada?- preguntó Rober volviéndose a sentar junto a Marizza pasándole el brazo por detrás del hombro-

Todo el mundo se había quedado petrificado con la noticia

- Felicitaciones, Disculpen, voy a servir el segundo- dijo Eugenia deseando retirarse

- Mi amor, decí algo

Todos miraban a Marizza, Pablo paralizado sosteniéndole la mirada

- Amor, reaccioná... es que ni ella lo sabia, se acaba de enterar- explicó Rober-

- Es obvio, por la cara que se le ha quedado- apuntilló Ale

- Te llamaron de los laboratorios donde te hiciste los análisis, y es positivo, vamos a ser papás

Marizza seguía enmudecida, Pablo no le quitaba la mirada de encima y con ceño fruncido preguntó:

- ¿Te habías hecho análisis?

Marizza logró reaccionar con una tosesilla y lo miró haciéndolo una mueca y contestando un escueto: - si

- ¡Que bueno! ¡Un hermanito para Ada!- exclamó Alejandra- os felicito- dijo alzando la copa para después dar un trago

- ¿Cuándo llamaron?- preguntó Marizza con voz entre cortada dirigiéndose a Rober

- Recién, me estaba preparando para bajar y atendí el teléfono

- Me podías haber dicho a mi antes ¿no?

Marizza molesta se levantó de la mesa y dejó la servilleta

- Vení, tenemos que hablar-

Rober se levantó con sonrisa irónica y siguió a Marizza

Alejandra y Pablo se quedaron solos sin dirigirse la palabra

Una vez en el cuarto, Marizza estaba alterada caminando por toda la habitación hablando por teléfono con los laboratorios donde se había hecho los análisis