CAPÍTULO 42

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(Con miedo despiertas, cada mañana
Con miedo tu empiezas, con miedo tu juegas
Con miedo a vivir, tu tienes miedo a vivir
Con miedo tu sacas todas las palabras (1)
Con miedo te expresas, con miedo a ser nada
Con miedo a vivir, tu tienes miedo a vivir (2)
Estas enfadado con todo lo que hay cerca de ti
Nunca te has gustado, y vives exigiéndote al máximo siempre,(3)
tu solo eres culpable de que ahora tu te veas así.

CORAZÓN, AHORA TIENES QUE PEDIRTE PERDÓN
POR CREERTE SIEMPRE FEO Y CULPABLE
Y SUFRIR CADA VEZ QUE SALE EL SOL)

Todo está en continuo cambio, un día decides hacer una cosa y al día siguiente decides hacer lo contrario. A veces, por mucho que quieras a alguien no puedes cumplir con lo prometido.

Si fuese el corazón el que hablara y no la cabeza...

Al día siguiente, Pablo en un descanso de su rutina, se acercó al colegio a ver a Tomás y juntos tomaron café en la sala de profesores.

- ¿Y qué tal? ¿Cómo va todo? – preguntó Tomás interesándose por la vida de su amigo

- Y ahí voy...que se yo...

- Mmm...Marizza otra vez

Pablo empezó a remover el café a toda velocidad. Esas charlas con Tomás también le servían como terapia, era el momento en el que podía sincerarse, desahogarse y sacar todo fuera sin tener que fingir

- Últimamente la veo bastante, como se lleva tan bien con la nena

- ¿En serio?

- Si, pegaron una onda increíble, se llevan bárbaro

- Bueno ¡mejor! – exclamó Tomás- cuanto más amor reciba esa nena mejor para ella, tuvo que ser jodido para ella criarse sin mamá

Pablo suspiró hondo después de beber un poco de café

- Si y Marizza sin la hija que...bueno ya sabes...

- Es todo muy complicado, no le des vueltas a lo que ya no tiene remedio, las cosas se dieron así macho –

Tomás le dio un golpecito en el hombro para que Pablo no pensara otra vez en la muerte de su hija y no se viniera abajo, pero era algo que le acompañaba a todos lados, esa hija siempre estaría presente en su memoria.

- Pero lo que me dijiste el otro día de Marizza... ¿fue un momento o te siguen pasando cosas con ella?

- Tomy- dijo el rubio arrastrando la silla acercándose a su amigo – esto yo te lo digo porque vos sos mi hermano, pero no tiene que salir de acá

Tomás asentó con la cabeza. Eran hermanos, eran confidentes y lo que hablaban se quedaba entre ellos dos.

- Lo que te dije de Marizza es la verdad, no fue un momento, es lo que me pasa y lo que me pasó siempre. Si me dolió tanto que me engañara con otro tipo es porque nunca he querido a nadie como la quiero a ella

Tomás tenía que entender a su amigo, aunque su vida amorosa tras el colegio no fue tan turbulenta. Le costó adaptarse a su suegro, pero su relación con Pilar era ideal, tenían problemas, como todas las parejas, pero eran los problemas típicos de la convivencia, nada en comparación a la vida que llevaba Pablo.

No podía creer que aun viviera ese amor después de seis años.

- Es así, aunque me engañe a mi mismo. Y aunque lo intente ocultar, esa es la verdad (1). (Con miedo tu sacas todas las palabras)

- Y si la amas todavía, larga todo con Alejandra y recuperá a Marizza

Esa era la lógica. Pero Pablo veía demasiadas trabas todavía, no se veía capacitado para afrontar la situación y lo más importante tenía un miedo terrible a equivocarse y volver a sufrir.

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