LIX

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Los voy a abrir.

Cuando los abrió, ambos cajones estaban vacíos. Ninguno de los tres se sorprendió por esto. Sacaron los cajones y los examinaron con cuidado. Te acercaste a examinar el mueble,buscando alguna pista. Viste que en el fondo había una madera, y estiraste el brazo para alcanzarla. Con un poco de fuerza, lograste arrancarla. Algo pequeño y redondo rodó por el suelo. Lo tomaste en tus manos.

—¿Qué es eso?— Preguntó Lucas.

—Esto... Se parece a la parte de atrás de la pluma.— Emma sacó la lapicera de su bolsillo y te la dió.

—¿Pero qué hago con esto?— Preguntaste.

—Intercambialas.— Sugirió el adulto. —Probablemente, eso sea...— Hiciste como te dijo y al activar la pluma se mostró una enorme cantidad de información.

—Todo esto... Es información nueva.— Balbuceaste. —Eso... Debe ser un chip de memoria. Esto son... Los “caminos” para cruzar, esto parece ser información de los aliados, y esto... ¡¿Un mapa de Goldy Pond?! ¡¿Por dónde empezamos a leer?!— De a poco,se pusieron de acuerdo para comenzar a leer toda la información almacenada. Tenían información de todas las granjas y de lo que realmente eran los siete muros, entre otras cosas.

—Solo nos queda un archivo.— Habló Emma, luego de un rato. —“Proyecto Lambda 7214”.

—Lo voy a abrir.— Dijiste, alzando tu mano hacia la proyección. —“En el límite oeste, se planea erigir un edificio...”— Empezaste a leer. —“Para una nueva...” ¿“Granja experimental”?¿Qué es esto? No hay nada más...

—Así parece...— Suspiró Emma.

—Pero esto es un montón de información.— Habló Lucas. —¡Con esto podemos escapar todos juntos! Podemos salir de acá e ir al mundo de los humanos.— Emma parecía nerviosa.

—Lucas...— Lo llamó. —Ese “asentamiento humano” que mencionó Oliver... Es una mentira, ¿No?

—¿Les mintió...?— Dudaste.

—Sí.— Contestó el susodicho.

—¿Por qué...?— Cuestionó la de cabellos naranjas.

—No quería engañarlos, pero ví a muchos chicos agarrar armas para dispararse a sí mismos después de saber la verdad. Tenía miedo... No quería que murieran, así que les dí esperanzas... Para que quisieran sobrevivir. Pero... Ya no tengo que engañarlos. Ahora se puede cumplir... Puedo llevarme a todos, realmente... ¡A un mundo sin comegente! Gracias, Emma y _________. Es todo gracias a ustedes. Porque vinieron con la pluma.

—No, por favor.— Negó la de ojos verdes. —Es porque usted y el señor se esforzaron hace trece años. Y porque aunque estaba en peligro, el señor Minerva... Escondió esto para nosotros.

—Igualmente, gracias...— Contestó el adulto. —Me alegra haberlas conocido. Juntos vamos a conseguir el futuro que deseamos. Vamos a terminar con este lugar y vamos a llegar sanos y salvos... ¡Al mundo de los humanos!— Subieron de vuelta al molino y allí le explicaron todo, revenlando la verdad a Oliver y los demás. Todos parecieron estar de acuerdo, y Emma y tú soltaron un suspiro de alivio.

—¿Qué pasa?— Les preguntó Violet.

—Nada...— Contestó la de cabellos anaranjados. —Nomás pienso que menos mal que aunque les reveló que no existe un asentamiento humano, todos reaccionaron... Mejor de lo que esperaba.— Sonrieron, recordando con nostalgia como Don había reaccionado cuando le contaron la verdad.

La letrista {Rayxtú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora