Un matrimonio por la paz.(Kiribaku)(Dom/Subverse)

Capítulo 13.

***
Con el pasar de los días, Eijirou pasaba más tiempo con su esposo. Esto dio como resultado que cada vez lo fuera conociendo más y su odio inicial se fuera disipando.

—Katsuki, ven conmigo.—Le dijo el pelirrojo una mañana tras el desayuno.

—¿Adónde?

—Nos vamos de viaje al Reino de los Todoroki.

—¿Qué? ¿Por qué?

—Porque tenemos que forjar lazos con otros reinos. Estaremos allí durante cinco días.

—Tchs, qué fastidio.

—No te quejes tanto que luego puedo compensarte adecuadamente.

El rubio cenizo, sorprendido, cuestionó:

—¿En serio? ¿Cómo?

—Pues... No sé, tal vez... Podría darte más libertad.

Al escuchar eso, los ojos del sub se iluminaron.

—Entonces trato hecho.

Eijirou sonrió de lado y dijo:

—En tal caso, no perdamos más tiempo y vámonos.

—Sí, sí, voy.

Dicho aquello, se vistieron con lujosas ropas y los llevaron en carruaje hasta el puerto; desde el que partirían hacia su destino.

***

Llegaron al Reino de los Todoroki cuatro días después. Cuando llegaron al castillo de éste, notaron que éste era de dos colores: Blanco y rojo.

"¿Por qué este castillo es de dos colores?"—Pensó Katsuki admirando aquel monumento.

Le hubiera encantando saber la respuesta, mas no quería preguntarle a su marido, pues no le agradaba todavía.

"Supongo que puedo preguntarle a alguno de esos bastardos de la Dinastía Todoroki."

El carruaje que los había estado llevando hacia el castillo, por fin paró y tuvieron que bajarse.

—Ya hemos llegado, Katsuki. Bajemos.

—Como sea.

Al dom no le gustó el tono molesto con el que el sub se había dirigido a él, sin embargo; eligió no discutir y bajó junto con el rubio cenizo. A continuación, las puertas de la muralla del castillo se abrieron y ambos caminaron por un largo camino que los conducía hacia la entrada principal en la que

—Buenos días, sus majestades. Mi esposo Katsuki y yo los saludamos.—Dijo el pelirrojo haciendo una reverencia.

Él dirigió su mirada hacia el más alto para ver si su esposo estaba también que éste saludaba de la misma manera. Algo que lo hizo sonreír.

"Parece que se ha tomado esto en serio."

—Incorpórense, por favor.—Dijo el Rey Enji.

Los dos príncipes se incorporaron y el de ojos turquesa les presentó a su familia.

—Esta es mi mujer, Rei.

—Encantado, Reina Rei—Yo soy Eijirou Kirishima.—Dijo el de dientes afilados presentándose.

—Igualmente, Príncipe Eijirou.

A continuación, el dom le presento a su sub tanto a ella como al resto de los integrantes de la familia. Todos actuaron correctamente, solamente el último de ellos, Natsuo Todoroki; fue quien se tomó ciertas libertades con Katsuki cuando los presentaron.

—Encantado de conocerlo, Príncipe Katsuki.—Dijo besando su mano y luego quiñándole un ojo.—Espero que disfrute su estadía aquí. De hecho, podríamos dar un paseo juntos y así le enseñaría el lugar.

Antes de que el sub pudiera responder, el pelirrojo intervino.

—Gracias por su ofrecimiento, Príncipe Natsuo.—Dijo Eijirou sonriéndole falsamente.—Pero creo que no sería apropiado que mi esposo fuera con usted a dar un paseo.

—¿Por qué?—No tendría nada de malo.

Con esa respuesta, el dom tuvo que forzar todavía más la sonrisa.

—Puede que no lo vea, ya que usted está soltero; pero no es adecuado y no hay más discusión.—Ahora, si nos disculpa, vamos a entrar a palacio juntos con sus padres y hermanos.

El albino, por su parte, sonrió falsamente también y contestó:

—Ya veo. Me disculpo ante usted, no debí faltarle el respeto de esta manera. Ruego por su perdón.—Dijo agachándose.

—Disculpas aceptadas.

Y dicho eso, se alejaron de Natsuo. Quien permaneció en su sitio sonriendo maliciosamente sin ser visto.

"Katsuki es muy hermoso. Tiene que ser mío. Lo conquistaré en estos cinco días."

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!