Capítulo 90.(corregido)

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***
Eijirou comenzó dándole un apasionado beso a su esposo, pues a ambos les gustaba iniciar sus relaciones sexuales de esa manera.

—Ei... Fóllame. Por favor...

—No te preocupes, ya voy a hacertelo.

El dom preparó a Katsuki y luego sugirió probar una posición nueva, cosa a la que el sub no se negó.

Dicha posición consistía en que el híbrido de dragón se sentaría sobre la cama y el rubio cenizo sobre sus piernas, enrollándolas por la cadera del pelirrojo. Quedando así abrazados.

—¿Estás cómodo, Mi Marnarak?

—Sí, estoy bien.

Sabiendo que su marido estaba conforme, no perdió el tiempo y empezó a mover sus caderas.

—Aah... Ah... Eijirou...—Gimió abrazándose más a su esposo.

El pelirrojo se sentía cada vez más excitado a causa de los gemidos y jadeos de su sub.

—Ah... Katsuki, me estás volviendo loco...

Katsuki sonrió y le contestó:

—Je. Lo sé... Ngh... Y eso me calienta... ¡Ah!—Gimió al final cuando sintió que el híbrido de dragón le daba una estocada.

Eijirou había aumentado la intensidad de sus embestidas y eso les causaba cada vez más placer en los dos.

—Aah, ah... Eijirou... Te amo, te amo.—Gimió moviendo más sus caderas.

—Y yo a ti, Mi Katsuki.

Entonces el rubio cenizo se separó un poco de su marido, haciendo que sus miradas se conectasen e iniciasen un beso apasionado.

Los sonidos obscenos continuaron un rato más hasta que alcanzaron el orgasmo.

Después se recostaron en la cama y el dom comenzó a darle cariño al sub.

—Por momentos como estos, me encanta cuando te enfadas.—Dijo el rubio cenizo en voz baja.

Eijirou se quedó paralizado por unos instantes y luego preguntó:

—¿Qué? ¿Te gusta esto?

—No, yo no he dicho nada.

—Lo has dicho, acabas de reconocer que te gusta que yo me enfade. No seas orgulloso y admítelo~

Katsuki se sentía juguetón y quiso continuar con su juego.

"Eso es, préstame atención."—Pensó el rubio cenizo contento con la situación.

—Mm... No, yo realmente no dije nada. Te lo has imaginado.

Entonces Eijirou tomó la barbilla de su esposo para voltearlo y que viera para así poder decirle:

—Lo has dicho, yo lo sé~

El dom le dio un beso en los labios y luego procedió a repartir besos por el resto del rostro.

Katsuki comenzó a reírse y tuvo que rendirse.

—Está bien, Mi Marnarak gana~—Dijo el rubio cenizo dándole un tierno beso a su novio en la mejilla.

Eijirou abrazó a su amado y dijo:

—Hoy estás desafiante y travieso, ¿acaso hay algún motivo oculto?

—No, es sólo que me gusta jugar contigo. Es divertido.

—Así que a Mi Katsuki le gusta jugar con fuego...—Eres muy valiente pero no te vayas a quemar~

—Eso no me asusta, mientras sea tu fuego el que me queme~

Una vez más, se miraron coquetamente y se besaron.

—Eres el mejor, Mi Marnarak.—Dijo abrazándolo con mucho cariño y amor.—Pero hay algo que quiero que hagas de manera temporal.

—¿De qué se trata?—Cuestionó mirándolo con curiosidad.

—Quiero que lleves puesto el collar de seda rojo que te regalé al principio de nuestro matrimonio.

—¿Qué? ¿Pero no decías que sólo me lo tendría que poner cuando fuésemos a viajar?

—Sí pero después de lo que ha pasado con Tetsutetsu, no quiero que nadie se confunda. Tú eres sólo mío y quiero demostrárselo a todos. Que no haya dudas.

—Pero Ei, tener que llevar ese collar me agobia.

—¿Qué te agobia?—Es imposible, es de seda. Debe ser el collar de sub más suave que existe. Hay otros subs a los que les hacen llevar collares de oro macizo, de plata y también con joyería bastante pesada. Así que deberías estar agradecido.

El rubio cenizo sabía de lo que hablaba su esposo y él mismo había visto collares así. Los subs que los llevaban parecían estar bastante incómodos con ellos puestos mas no tenían opción, debían mostrar su estatus y que ya le pertenecían a un dom poderoso.

—De acuerdo, me lo pondré.

—¡Gracias, Mi sub!

El híbrido de dragón estaba muy contento al ver que su amado cedía a su petición sin tener que luchar demasiado y eso le daba tranquilidad.

"De esta manera, nadie se atreverá a ofender a ni a Katsuki ni a poner en duda nuestro matrimonio. Estoy haciendo lo correcto."

Su estrategia callaría bastantes rumores, aunque otros surgirían debido al cambio drástico de ver al rubio cenizo con aquel collar de seda siempre en su cuello.

***

Obviamente, el detalle del collar no pasó desapercibido por parte de Ochako, la cual no dudó en expandir rumores falsos sobre éste.

Algunos periodistas, llenos de codicia y con intenciones maliciosas, contactaron con Uraraka para que está les proporcionase más información a cambio de dinero; algo a lo que ella no se negó.

"¡Por fin estoy obteniendo lo que corresponde!¡Benditos rumores!"—Pensó emocionada cuando llevaba una cesta de ropa sucia para lavar.

Lo que ella no sospechaba era que la familia Kirishima se encontraba reunida de urgencia a causa de los rumores.

—¡¿Cómo es posible que alguien de la servidumbre se haya atrevido a difundir información sobre el embarazo de mi yerno?!—¡Es intolerable!—Gritó Daiki furioso.

Su esposa Hiroko, temblando; trataba de calmarlo pues a ella le afectaba la voz del rey, a diferencia del rubio cenizo, que se mantenía extramente sereno.

—Padre, cálmate. Estás alterando a mi madre y Mi Marnarak está embarazado, contrólate.

El dom mayor observó a su hijo y suspiró sabiendo que tenía razón.

—Perdona, hijo. Es que esto no había sucedido jamás. Pero lo solucionaremos rápido.—Haré llamar a toda la servidumbre para interrogarlos uno a uno.

***
Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!

Un matrimonio por la paz.(Kiribaku)(Dom/Subverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora