Un matrimonio por la paz.(Kiribaku)(Dom/Subverse)

Capítulo 92.(corregido)

***

Debido a la confirmación del embarazo del Príncipe Katsuki, los grupos antimonárquicos del Reino de los Kirishima; aumentaron su actividad, pues les disgustaba la idea de que la Familia Real tuviera más descendencia.

Por ello, se reunieron clandestinamente en una casa que se encontraba abandonada y que era lo suficientemente grande como para albergar a 25 personas.

—Sabiendo que esas cucarachas se han reproducido, debemos impedir que ese embarazo llegué a su último trimestre. No podemos permitir que esos bastardos nazcan.—Dijo uno de ellos.

—¡Sí! ¡Ellos deben morir junto con el sub que los está engendrando!—¡¿Quién está conmigo?!

Todos gritaron en señal de acuerdo y alzaron sus jarras de cerveza.

—¿Y cuál es el plan?—Porque no creo que sea sencillo provocarle un aborto.

—No, no lo será pero... Creo que alguno de nosotros podría pedir empleo como mayordomo o como criada. Pero tiene que ser alguien que no parezca sospechoso de odiar a la monarquía y que pueda inspirarles confianza. ¿Alguna sugerencia?

Todos permanecieron en silencio pensando en quién sería la persona adecuada para infiltrarse en el castillo.

—Yo me ofrezco.—Dijo una chica de ojos azules.

Los allí presentes se volvieron hacia ella y el líder del grupo la llamó.

—Acércate, muchacha. Quiero verte más de cerca.

La chica se acercó y, cuando estuvo frente al líder del grupo; éste le preguntó:

—No recuerdo haberte visto por aquí anteriormente, ¿es tu primera vez aquí?

—No, sólo he estado presente en tres reuniones pero las anteriores veces me había disfrazado.

—De acuerdo. ¿Cuál es tu nombre?

—Itsuka Kendou.

—Dinos, Kendou. ¿Cuál es tu motivo para unirte a nosotros?

—Mi motivo es la venganza. Los Kirishima me arrebataron a la persona más importante de mi vida y quiero que todos ellos mueran.

Su respuesta agradó a todos mas el líder quiso indagar más.

—Me agradas, Kendou.—Sin embargo, quiero saber una cosa más, ¿hay alguna posibilidad de que los Kirishima te reconozcan?

—No, ninguno de ellos me ha visto.

—Perfecto. En ese caso, tú eres la elegida para infiltrarte en el castillo.

La de cabello anaranjado sonrió y dijo:

—Gracias, no les decepcionaré.

Itsuka estaba determinada a vengar a Kemy, dispuesta a todo para lograrlo.

"Haré que te arrepientas de lo que le hiciste a Mi lady, Eijirou Kirishima."

***
Por otro lado, Eijirou no se separaba de su esposo nada más que para lo imprescindible y siempre le asignaba a un escolta de los más fuertes en su ausencia.

Al rubio cenizo no le agradaba esto, sin embargo, entendía que la situación actual lo ameritaba.

—Estoy deseando que nazcan ya. Detesto tener que depender de otros.

En ese momento, Shōto Todoroki, que se encontraba allí junto con sus padres para hacerles una visita, dijo:

—No es malo aceptar la ayuda de otros.

—¡Pero esto no es ayuda! ¡Es dependencia!

—No, Príncipe Katsuki. Esto es una ayuda para usted y no es algo negativo—Comentó para darle un sorbo a su té, el cual  tomaban en el jardín siendo acompañados de un guardia de confianza.

—Supongo.—Respondió el rubio cenizo bebiendo de su té.

Se hizo un breve silencio y Katsuki quiso cambiar de tema para preguntarle al bicolor sobre su situación personal.

—¿Ya te han comprometido con algún dom?

Al oír la pregunta, Shōto estuvo a punto de escupir el té pero logró contenerse.

—N-no, de momento nadie me ha ofrecido una propuesta de matrimonio ni mis padres han encontrado a alguien para casarme.

—Ya veo... Pero ya no estarás enamorado de mi marido, ¿verdad?

—¡Claro que no!—Yo no quería meterme en su matrimonio pero pensaba que no había amor entre vosotros, lo siento.

El sub notó que el más joven de los Todoroki estaba siendo sincero, así que lo disculpó.

—Tranquilo, yo en ese momento no amaba a Eijirou como lo hago ahora.

El bicolor se sorprendió, pues para él, Eijirou era el dom ideal.

—¿En serio? ¿Por qué?

—Nuestras familias se odiaron durante generaciones y ambos pensábamos mal del contrario debido a las historias que siempre se contaban cada familia.

—Oh, comprendo. Los dos estabais adoctrinados, sin embargo, ¿no sentiste atracción por el Príncipe Eijirou al verlo?

Katsuki se ruborizó ligeramente y respondió:

—Entre tú y yo: Eijirou me pareció jodidamente sexy desde el primer instante en el que lo vi. Amé nuestro primer beso, se sintió bien pero entre mi odio hacia él y su actitud, todo se estropeó.

—Entonces quieres decir que, si el Príncipe Eijirou te hubiera tratado bien desde el principio; ¿le hubieras dado una oportunidad antes?

—Sí, eso mismo.—Aunque bueno, tampoco tardé demasiado en darle una oportunidad y me alegro de haberlo hecho porque lo amo. Es el mejor esposo de todos.—Reconoció sonriendo tiernamente.

El bicolor sonrió de la misma manera y dijo:

—Me alegra que las cosas hayan mejorado entre vosotros desde la visita a mi reino.—Por cierto, ¿sabes ya si serán niños o niñas?

—No, aún es pronto.

—¿Y cuándo lo sabrás? ¿Cómo te sientes al estar embarazado?

Katsuki se sorprendió de que Shōto estuviera tan hablador, así que contestó a sus preguntas.

—Lo sabré cuando dé a luz y, en cuanto a cómo se siente; pues no es sencillo de explicar. Sin embargo, puedo decirte que es una  sensación un poco extraña saber que estoy albergando tres vidas en mi interior. Y, el que primero nazca, será el heredero de dos reinos que fueron unidos por mi matrimonio.—Dijo con cierta emoción.

—Lo que cuentas suena como algo maravilloso.

—Lo es.—Dijo el rubio cenizo acariciando su vientre.

Poco después, llegó Eijirou y se llevó a su esposo consigo porque lo echaba de menos y consideraba que ya habían permanecido demasiado tiempo separados.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!