Capítulo 46.

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***
Katsuki fue llevado por Hana a otro lugar del jardín para jugar a un juego llamado la pelota caliente, en el cual no podías tener la pelota en las manos por mucho tiempo y debías pasarla rápido. Perdería el primero al que se le cayera.

—¿Es sencillo el juego, cierto?—Preguntó la sub tras haberle explicado en qué consistía el juego.

—¡¿Crees que soy tonto o qué?!

—No, sólo lo decía por cortesía. ¡N-no me malinterpretes!

—Tchs está bien. Juguemos y ya está.

Hana agarró felizmente la pelota que había escondido en el jardín y el juego comenzó.

Ambos eran buenos en el juego y no parecía que fueran a ceder pronto. Más bien lo contrario, pues cada vez se volvían más competitivos.

—¡Ríndete! ¡Yo soy mejor!—Exclamó Hana.

—¡Ja! ¡En tus sueños!—Gritó lanzado la pelota hacia la prima de su esposo.

Ella agarró el balón de nuevo y el proceso se repitió de nuevo.

Katsuki comenzaba a aburrirse y se desesperaba al ver que la chica no flaqueaba.

"¡Maldita! ¡No quiero perder pero esto es demasiado!"

El rubio cenizo pensó en varias ideas y llegó a la conclusión de que lo mejor era lanzarle la pelota con más fuerza que las otras veces.

—¡Agh!—Se quejó dejando caer el balón al suelo.—¡Lo has lanzado muy fuerte aposta!

—¡Sí! ¡Porque quería acabar con el jodido juego!

—¡Pues haber soltado el balón!

—¡No quería perder!—¡Además, tampoco creo que te haya hecho tanto daño. Eres una exagerada!

—¡No lo soy! ¡Me has hecho daño!

—¡Mentira, no puede ser!

Ninguno de los dos dejaba de discutir y, antes de que se matasen; Hiroko se dirigió a ellos en compañía de Hitoshi.

—Chicos, ¿qué está pasando aquí?

Ambos lo miraron y Hana, al verla, fue corriendo hacia ella diciéndole:

—¡Tía Hiroko! ¡Katsuki está siendo malo conmigo!—Dijo abrazándola como si fuera una niña a pesar de ser ya una adolescente de 17 años.

—Hana, no sé qué ha sucedido pero no actúes como una niña de cinco años.

—¡Pero tía Hiroko, Katsuki me ha hecho daño!

—¿Pero cómo ha pasado todo?—Contádmelo.

Entonces Katsuki comenzó a dar su versión, siendo interrumpido por la muchacha en todo momento; consiguiendo así sacar al sub de sus casillas.

—¡Deja de hacerte la víctima!

—¡Vete a la mierda!—Gritó Hana.

La pelirroja, viendo que no se calmaban; intervino con decisión:

—¡Basta!—¡Los dos sois mayores! ¡Comportaros como personas de vuestra edad!

Al escuchar a la madre de Eijirou siendo intimidante, los dos subs se calmaron un poco y hasta se avergonzaron.

—Lo sentimos.—Dijeron los dos adolescentes a la vez.

Viendo que había entrado un poco en razón, Hiroko dijo lo siguiente:

—Katsuki, reconoce tu error de haber golpeado con mayor dureza aposta a Hana y discúlpate.

El de ojos rubí supo que no tenía alternativa, mas su suegra llevaba razón, él había golpeado un poco más fuerte de la cuenta a la otra sub.

—Lo siento, Hana.

Ella sonrió y respondió:

—¡Perdonado!

Tras haber hecho las paces, cada uno decidió irse por su lado.

"Jodida estúpida mimada."—Pensó entrando al palacio con la intención de irse al dormitorio matrimonial.

***

Una vez dentro del castillo, Katsuki caminó deprisa por los pasillos para llegar a sus aposentos cuanto antes y así descansar.

Por el camino, se topó con un herido Akemi, pues su castigo había finalizado hacía apenas unos minutos.

"Creo que tomaré otro camino, no quiero cruzarme con ese hijo de puta."

Entonces el rubio cenizo se fue por otro pasillo y, un poco más tarde; llegó al dormitorio.

—¡Por fin!—Exclamó cuando se tumbó sobre la cama.—Aprovecharé que esa lagartija en celo no está aquí para dormir.—Murmuró cerrando los ojos para relajarse y dormir.

Por desgracia, su descanso no duró más allá de 10 minutos; pues pronto sintió un peso sobre él.

—Marnarak~—¿Por qué no hacemos algo divertido aquí en la cama?—Dijo para, a continuación; comenzar a besar el cuello del sub.

—Mmm~ Eijirou...—Susurró sonriendo de manera pícara.

El pelirrojo también sonrió y le dijo:

—Entonces, ¿qué me dices? ¿Quieres que pasemos un rato agradable juntos?

El sub se volteó para mirarlo y contestarle:

—Sí, házmelo, Ei.

Con esas palabras, ya no hizo falta decir nada más.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!


Un matrimonio por la paz.(Kiribaku)(Dom/Subverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora