AU. Katsuki y Shouto son exnovios. Sí, exnovios que durante la fiesta de año nuevo no pudieron evitar explotar delante de sus amigos y vecinos que llamaron a la policía.
Fueron encarcelados y luego con ayuda de un buen amigo, es que todo se redujo a...
—Creo que todo acabó finalmente. —Comentó Shouto a Izuku, este arqueó una ceja.
—Definitiva o ¿vas a seguir teniendo tus altibajos? —Cuestionó, no es como que le molestara consolar a su amigo, pero llegaba un punto en el que ya le parecía un juego lo que sucedía con Katsuki y ese no era solo su pensamiento sino también el de Eijirou.
Ambos coincidían en que un largo periodo de paz podría causar un cataclismo cuando finalmente una discusión por lo que sea —así sea mínima— estallara en sus caras, Shouto y Katsuki eran de temperamento fuerte cuando de proferir impertinencias se trataba porque eran capaces de desearle la muerte al otro y arrepentirse al segundo.
Además de que su estado de ánimo estaba por los suelos, ya sabía que tanta convivencia con el sujeto de tus penas sería duro para Shouto, pero con honestidad no creyó que sería TAN malo como lo venía presenciando desde hacía dos meses, a veces llegaba el punto en que no podía hacer nada más por Shouto que escucharlo porque no aceptaba consejos, era terco.
No quería hablar con Katsuki ni pedir explicaciones de sus actos, empero se la vivía sufriendo por él. Y para el verduzco que paciencia debió ser su segundo nombre a parte de Izuku, ya era una cagada.
—Te lo digo porque estas idas y venidas si agotan emocionalmente. —Anunció con sus manos enterrándose en los músculos tensos del cuello, su epidermis llena de motas exponiéndose ante el cuello desabrochado de su camisa con la corbata a medio arreglar.
—Te digo que me siento muy vulnerable, no sé Izuku… cuando vamos bien llega algo que lo empeora o provoca peleas —Confesó— ¿Si te conté de su jefa y la amenaza para Katsuki? desde ahí todo fue en picada.
—Sí me lo contaste, pero… ¿te das cuenta de que nada de lo que pase con Katsuki es tu asunto? —Inquirió quitándose la corbata, Shouto rechinó los dientes asintiendo frente al peliverde— entonces, ¿Por qué lo haces?
—Él me importa.
—Lo sé, me lo has dicho muchas veces, pero ¿Qué significa que te importa? —Volvió a cuestionar.
Necesitaba que Shouto pusiera de su parte porque no podía apoyar una relación que con cada día se volvía más tóxica para ambos, y eso que ÉL era el primero en hacer lo posible por ayudarlo, después de todo bajo la perspectiva de Izuku ellos eran una pareja perfecta.
—Katsuki siempre va a ser importante para mí incluso si él no siente lo mismo que yo. —Anunció, Izuku entrecerró los orbes.
—Él renunció al trabajo de sus sueños por ti ¿crees que no siente lo mismo que tú? —Preguntó con hastío en su tonalidad a veces quería darle un golpe a Shouto, pero uno bueno, con ganas hasta reiniciarle el Windows.
—Supongo… no sé…
—¿No sabes? —Inquirió cruzándose de brazos, Shouto agachó su mirada entendía lo que Izuku quería llegar, pero no podía aceptarlo— sabes porque no entiendes… ¡Porque no le preguntas! —Enervó izuku esperando porque Katsuki en la terraza no escuchara nada— ¡Dios, Shouto! ¡solo ve y pregúntale si te quiere!
—Me da pavor su respuesta.
—¿Y qué prefieres? ¿quedarte con la duda de si hiciste lo correcto al dejarlo? O ¿confirmar que su relación acabó al fin porque él escogió a alguien más? —Dio opciones entre una mano y la otra con seriedad en su voz que solo aparecía en los juicios—. Shouto esto es patético, que no hablen claro hasta que alguien más aparece, ¿crees que así es una relación?
—No, no lo es.
—Exacto. Necesitan hablar y por sobre todo aceptar sus errores. —Expresó levantándose de la cama del otro—. Esto se vuelve peor para ustedes porque no hacen nada para remediarlo, estoy seguro que has pensado en confrontarlo, pero el miedo te detiene y así, Shouto, no vas a llegar a ningún sitio ni con Katsuki ni con ninguna pareja que vayas a tener.
—Estas siendo muy duro… —Balbuceó— das miedo Izuku.
—Doy más miedo cuando me enojo de verdad, así que por favor… haz algo por ti. Tienes UN mes para enfrentar a Katsuki y terminar esto bien o mal, pero ya basta de tantas vueltas.
Izuku dejó a Shouto en su habitación regañándose a sí mismo por al fin colmar la paciencia de Izuku.
—Ah… no puedo más… —Se echó sobre la cama para descansar, no tenía que decir nada para saber que Izuku tenía razón y debía hablar con Katsuki, ya fuera de mamada debía hacerlo por su bien emocional, así cuando tuviera una respuesta podría morir en paz.
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