Te casas con uno y también lo haces con sus seis hermanos. Su lema favorito: Lo tuyo es mío y lo mío es tuyo, pero de nadie más... Nadie más puede fijarse en lo que les pertenece.
Prohibida su copia u adaptación.
II PARTE DE LA HISTORIA
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|TN|
Una extraña vibración en mi pierna me saca de las profundidades del sueño, por lo que hago un esfuerzo para ignorar la molesta sensación y continúo con los ojos cerrados. Pues me resulta bastante placentero y trato de sumirme en el sueño, pero de nuevo esa molesta vibración en mi pierna me hace removerme y en ese instante me doy cuenta que algo no está bien...
Abro los ojos con rapidez y libero una maldición sintiendo una ligera molestia en la vista debido a la claridad matutina que entra por las ventanas, pero ignoro esto y saco la cosa que vibra en mi pierna y pronto me doy cuenta que se trata de mi celular. Miro con rapidez la pantalla y observo que se trata de una llamada.
«Hyunjin».
Toda soñolencia desaparece de mí, pues al instante miro el alrededor asustada a sabiendas de que este es el peor lugar para responder una llamada de él.
«Quizá es algo importante».
Me acomodo sentada sobre la cama y observo con atención la llamada entrante meditando la posibilidad de colgar, pero luego miro el alrededor solitario y decido responder.
—Hola —digo en voz baja.
—Tn, disculpa que te llame tan temprano, ¿Te desperté?
Me levanto rápido de la cama y corro hacia el cuarto de baño verificando que nadie se encuentre allí, una vez lo hago y miro que no hay nadie sonrío más aliviada. Por lo que me adentro al lugar y cierro la puerta con seguro.
—No te preocupes, no hace falta mucho para que mi alarma suene así que me hiciste un favor... ¿Necesitas algo? —inquiero caminando hacia el mueble del lavado.
—Esta mañana decidimos comer con los chicos en una de las salas de la empresa.
—Oh, qué bueno...
—Fue idea de Lisa y las demás chicas para que pasemos un rato agradable antes de trabajar, como no respondiste a sus mensajes anoche, me pidieron que te llamará y te avisara para que desayunes con nosotros.
«Quizá pueda hablar con Jennie».
—¿Quiénes irán?
—Estarán las chicas, creo que Félix, G Dragon, invitaron a Taeyong, también a Chris y quizá vaya a alguno de mis otros amigos del grupo —contesta y por su tono de voz animado me da la impresión que está sonriendo.
Miro mi deplorable aspecto a través del espejo y fuerzo una sonrisa.
—Está bien, comeré con ustedes —acepto sin poder evitar sentir unos ligeros nervios, pues cada vez que me involucro en este tipo de reuniones algo sale mal.
«Espero que este no sea el caso».
—Genial, entonces pasare por ti en el salón de prácticas para llevarte a la sala en la que comeremos —musita con más alegría.