10 de Diciembre en la mañana.
Los 13 chicos y el atlante salen de la casa de Román en el Cadillac de Miranda, van en dirección hacia Teotihuacán:
—¿A qué hora llegará el cometa? —pregunta Román.
—Después del medio día —dice Neez— Pero debido a su cercanía, su onda gravitacional provocará algunos temblores.
—Oiga —dice Román— Tuve un sueño ayer en la noche.
—¿Otro sueño? —pregunta Miranda.
—Si —dice el chico— Vi a dos serpientes diferentes que giraban en círculos que se oponían y en el centro estaba el sol.
—¿Serpientes que bailan y el sol, en medio? —menciona Neez— Suena como... espera un momento.
—¿Qué? —pregunta Román.
—Es la respuesta —dice Neez— Ese sueño te dijo la escultura donde se encuentra la pista que estaba buscando.
—¿En dónde está? —pregunta Román.
—Es la Piedra del Sol —dice Neez— La que llaman Calendario Azteca.
—¿Allí viene la respuesta? —dice Román.
—Si —dice el atlante.
—Podemos verla después de que detengamos el cometa —dice Diana.
—Pero si algo pasa —dice Oscar— No digo que Román pierda, ¿pero si un trozo del cometa le cae encima?
—Tengo entonces que separarme e ir al museo donde está —dice Neez.
—Yo iré con usted —dice Zogbi.
—Pero espere —dice Román— ¿Está seguro?
—Si —dice Neez— Puedes detener el cometa, nosotros nos encargaremos de descifrar la profecía.
—De acuerdo —dice el chico.
—Bien muchacho —dice Neez a Zogbi— Sígueme —y diciéndole a Román le dice:
—Te alcanzaremos en cuanto haya descubierto la profecía.
—De acuerdo —dice el chico.
Neez y Zogbi se bajan del auto de Miranda y corren hacia otro lado, corriendo Zogbi le dice:
—¿Cree que corriendo lleguemos a tiempo al Museo de Antropología?
—¿Qué sugieres? —pregunta Neez.
—¿Usted no tiene nave atlante? —pregunta Zogbi.
—La tiene Glenz en su edificio —dice Neez— Y no tengo el control para traerla, además ya no recuerdo del todo cómo funciona ¿Se te ocurre una idea?
—Eso —dice Zogbi mientras señala una moto estacionada.
Los dos toman la moto y se suben a ella, el muchacho la enciende y van hacia el museo. Se mueven a gran velocidad por las calles vacías de la ciudad.
Más tarde, Román y compañía han llegado a Teotihuacán, la zona arqueológica, al igual que la ciudad de México y alrededores están vacías.
Los 9 chicos se bajan del auto y Román les dice:
—Quedamos sólo nosotros, yo, Oscar, Julián, Miranda, Diana, Areli, Mariela, Brenda, Rubí, Marisol, Delia y Selena.
—Somos 12 —dice Miranda— Pero somos suficientes... espero.

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Saga de Román
AdventureRomán, un chico que parece llevar una vida como la de cualquier chico de su edad, pronto descubre que quizá su vida no es tan normal. Fantasmas, terroristas, monstruos, reyes y científicos locos, toda una pléyade de villanos que a su par...