Mia Jenner ➸ J.b

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La sala quedo en total silencio, yo aun seguia con mi mano izquierda cubierta de sangre colgando en el aire, sostenía mi movil con mi mano derecha y mi boca era una total "o" 
Aun sigo sin creer que Kourtney fue capaz de hacerme esto, entiendo que me lo tenia merecido, ella pudo haber lanzado la pera devuelta y golpearme en la mejilla, en mi frente o donde sea. ¿Pero un jarrón de cristal nuevo totalmente costoso? Estaba segura de dos cosas y es que «Mamá la va a matar» y si esto deja cicatriz yo igual voy a acabar con ella.

—¿Te sientes bien? ¿Te duele mucho? ¿Quieres que llame al nueve once?—Las preguntas de Kim me bombardearon de inmediato, pude notar el nerviosismo y la preocupación en su voz. 

No podía hablar, oh eso pensaba. Estaba totalmente en shock y tenía miedo, miedo de que dejara cicatriz miedo de que la herida sea muy grande o muy abierta, quiero a mi mamá. Asentí lentamente, mi mirada estaba fija hacia el frente, mi reflejo estaba en la ventana. Solo me veia a mi, con mi boca entreabierta con mis manos colgando y mi mejilla sangrando, había manchado mi Top crop color rojo vino, suerte que no se notaba tanto. Mi Jeans azul claro estaba algo manchado también el suelo de mármol, mamá me matara. Kim habia desaparecido de mi lado, creo que fue por el teléfono, de Kourtney no se nada luego de que arrojo el jarrón me supongo que desapareció, espero que no regrese en mucho tiempo. 

Sentía que si giraba mi cabeza iba a sangrar mas, no quiero hacer nada, solo quiero que los malditos paramédicos lleguen pronto. —¿Kim?—Pronuncie, no sabía quien estaba detrás mío

—¡Dios mío Mia! ¿Que demonios paso aquí? ¿Porque hay sangre en el suelo?—Era la voz de Khloe, se colocó al lado mío yo voltee a verla lentamente y aquella cubrió su boca.

—La loca desquiciada de Kourtney me arrojo el jarrón. ¿Me haces un favor?—No espere que aquella asintiera o negara —Dime si esta muy profunda. .— 

—Estas bien, creo.—Aquella quiso acercarse para tocar la herida pero yo retrocedí rapidamente.

—¡No! ¿Estas loca? no te dejare tocarla, solo respondeme si está muy abierta si o no.— 

—Nena ya te dije que estas bien. .

—Un «Estas bien» no es suficiente para mi, necesito saber si es un si o un no y por amor a Dios, no mientas para tratar de calmarme porque ¿Adivina que? ¡Estoy demasiado alterada!—Grite

Ahora si ya estaba harta, donde mierda estaban los paramédicos la herida ya me empezaba a doler y no habia señal de ellos por ningun lado. Escuche unas sirenas proveniente de afuera, cerré mis ojos, milagro. Escuche voces en el pasillo, seguido de la voz de Kim indicando donde estaba. Dos paramédicos entraron en la cocina, uno de ellos volteo levemente mi cabeza para poder observar mejor la herida, lo vi por el rabillo de mi ojo izo una extraña mueca y le indico a su compañero que trajera la camilla. 

Esto esta mal. 

Me senté en la camilla, mamá salió de su oficina y frunció el ceño al verme en aquella camilla, con dos paramédicos a cada lado y la cara toda pálida. —¿Pero que rayos?— 

—Es una larga historia, te la cuento en el hospital si quieres quédate aquí tranquila yo iré con ella y todo estará bien.—Kim tomó su chaqueta negra de cuero y la coloco rapidamente sobre sus hombros. Khloe la siguió detenidamente, cuando faltaba poco para salir de la casa habia un gran espejo colgado en la pared, voltee mi rostro y pude observar la herida, iba desde poco más abajo de mi oreja izquierda hasta pocos pasos de mi labio inferior, ¡Te voy a matar maldita zorra!

—¡Voy a matar a esa chica!—Grite mientras trataba de levantarme de la camilla, pero los paramédicos sujetaron mis brazos. —¡Sueltenme! ¡Déjenme ir! 

—Mia tranquila oh todo sera peor. .—Khloe colocó su mano en mi frente, pero en seguida se la retire.

—¡No me toquen!—Chille quitando todas las manos de mi cuerpo, estaba alterada, nerviosa y temerosa. Todo empezó a ponerse borroso, veía las caras de Kim y Khloe distorsionadas y mis pestañas empezaron a doler, caí rendida. 

Mire a mi alrededor algo confundida, ¿Estaba en una sala de hospital? si, si estaba. Todo era blanco, frente a mí a pocos metros se encontraba un espejo y una repisa con un gran arreglo de flores blancas. Sonrei, cerré mis ojos y los abrí cuando estaba recostada en la almohada suave, no estaba conectada a ninguna máquina ni tampoco tenía suero, eso me tranquilizo. 

A pocos metros de mí se encontraba una tv plasma y un sofá color gris, dos mesas de noche con un jarro de agua y algunas pastillas, del otro lado había globos, y una que otra tarjeta. Al fondo junto con los globos, se encontraba una gran ventana con vista al hospital y parte de la ciudad, era de día ¿habia dormido tanto? 

Del pasillo provenían risas, voces y algún que otro comentario que no pude descifrar muy bien. Sonrei y volvi a recostarme en la almohada, toque mi mejilla izquierda y llevaba un pequeño tachuelo quizas ya me habían cosido, Dios por favor que sea sin cicatriz. 
Habian pasado dos minutos y nadie pasaba o abría la puerta, pensé que sería como los libros tan pronto la chica despierte ya hay más de cinco personas en la sala. ¿Ahora que? me levanté de la camilla, llevaba una bata blanca, ¿Estaba en un manicomio? no, no. Tome las sandalias negras que estaban a un lado en la camilla, camine lentamente hacia la puerta, no estaba enferma solo era un rasguño en mi mejilla. Gire el picaporte y sonrei al ver a mis chicos sentados del otro lado del pasillo.

—¿Adivinen quien revivio?—Sonrei levemente señalandome. Todos aplaudieron, pero una enfermera se colocó frente a ellos, con su ceño fruncido y sus brazos cruzados.

—Deben guardan silencio, ya se lo he dicho varias veces—Reprocho. —En cuanto a usted señorita Jenner, debe volver a su camilla, le informare a su madre que despertó a estado muy preocupada por usted. 

—Pero yo no tengo nada, ya lo que tengo lo cubrieron no entiendo porque debo volver a la camilla.—Rodee mis ojos.

—Si fuese por mi, ni siquiera la trajera al hospital pues no es nada del otro mundo. Pero son órdenes superiores, ahora vuelva a su camilla.—Mire por sobre sus hombros, Lil Za le hacía muecas mientras que Khalil le mostraba su dedo medio, sonrei burlona y asenti. 

Volví a recostarme en mi camilla, si eso era necesario para que señorita regaños se fuera entonces lo haría. Una vez que ella cerró la puerta, volví a colocarme de pie tome mi móvil que se encontraba sobre la repisa junto a las flores, alli se encontraba una tarjeta la sostuve entre mis manos y la lei.

«Shawty, espero que te mejores lamento no estar ahi contigo para cuando despiertes, pero tengo cosas que hacer. Prometo que cuanto termine ire a verte y estare contigo. Recuerda que todo va a estar bien Att: Justin»

Sonrei, sonrei amplio y no tengo idea del porque mi corazon latio mas rapido al ver quien escribrio la tarjeta. Mis mejillas ardian, levante la vista y estaba algo sonrojada, no no Mia no. Negue varias veces y sacudi mi cabeza, no es posible que tu estes asi, no lo haras no denuevo.