Una "aventura" en Fire Emblem Heroes

Ojo de buen cubero

Sin duda han estado pasando unos días bastante curiosos últimamente, con todo el asunto de Sharena que, cada vez se hacía más obvio para todos excepto para Fjorm, sumado a los repentinos días donde no veíamos en todo el día a Henry, las piyamadas familiares que organizaba María para pasar más tiempo con sus hermanos y, el chisme que estaba circulando en el castillo de que al parecer, Gunnthrá pasaba muchas horas en el despacho de Anna, al punto de amanecer dormida en el escritorio, estaban comenzando a circular algunos rumores de que había algo entre ellas dos, cortesía de Est, Lene y Lissa.

Hoy me encontraba en la sala de descanso con varios de los héroes de la orden, era de esas escasas ocasiones en la que estábamos varios reunidos en una sala y ciertamente, cada vez me daba cuenta de que éramos bastante gente, quizás sí teníamos posibilidades de salir enteros de la invasión a Nilf, aunque aun me preocupaban ciertos detalles del modo historia que... no estaba segura si podría lidiar con ellos o en su defecto evitarlos.

Estaba mostrándole uno de mis libros de fantasía cómica a Ishtar que, había comenzado a tomarle interés a este tipo de libros gracias al libro de Mort que le preste, cuando una pequeña discusión en la sala, prometía ser algo que acabaría destruyendo la tranquilidad del ambiente...

-Ya escúpelo Gunnthrá, ¿La comandante Anna y tú tienen una relación o algo así?-dijo Lissa en tono insistente, quien estaba jugando cartas con Ayra, Héctor y L'Arachel.

-Y-ya les he dicho muchas veces que solo he ayudado a la comandante Anna con unas cuentas-dijo Gunnthrá muy apenada y ligeramente nerviosa.

-Crees que caeremos con una excusa como esa-dijo Est en tono decidido.

-Y mucho menos cuando siempre sales de su despacho con el cabello algo alborotado y la ropa desacomodada~-dijo Lene en tono risueño y dándole uno ligeros golpecitos en el costado a Gunnthrá... se ve que esas niñas nunca se han quedado dormidas en un escritorio...

-¡Ya basta!-dijo Fjorm indignada y poniéndose de pie junto con Sharena-Si mi hermana dice que solo ha hecho eso, entonces no tienen porque dudar de su palabra-dijo Fjorm en tono molesto asustando un poco a las tres.

-Fjorm tiene razón, si Gunnthrá dice que no hay nada entre ellas, entonces no veo porque deben seguirla molestando-dijo Sharena apoyando a Fjorm.

-¡Además dejen de interrumpir nuestra partida de póker!-dijo Héctor molesto.

-Juro que si siguen con eso, no dudare en sacar mi espada-dijo Ayra en tono algo frio, haciendo que Lene se ocultara inmediatamente detrás de Est y Lissa.

-Sin contar de que es completamente grosero e inaceptable que ustedes acusen de esa forma a una princesa de tan noble cuna como lo es la princesa Gunnthrá-dijo L'Arachel en tono ofendido.

-Oye no estamos acusando a nadie, solo queremos saber la verdad-dijo Lissa en tono seguro.

-Y de todas maneras han perdido ochos rondas seguidas contra Gunnthrá, deberían rendirse ya-dijo Est en tono burlón.

-¡Me rehusó a creer que la princesa Gunnthrá sea alguien invencible!-dijo Ayra en tono decidido.

-Gunnthrá sin duda tiene una de las más sagaces mentes con las que me haya medido en una contienda, pero como la legendaria dama de la luz, me rehusó a creer que he encontrado a un rival al cual no pueda derrotar-dijo L'Arachel en tono solemne.

-Además estoy seguro de que uno puede lograr lo que sea con esfuerzo y dedicación-dijo Héctor en tono seguro.

-Héctor eso no aplica para todos, puedes animar a una almeja a leer pero eso no la llevara a la universidad, todos tenemos un límite y el tuyo es en cuestiones donde debes usar la cabeza-dijo Serra sin mucho interés mientras jugaba uno de mis juegos de mesa junto con Catria, Henry y Verónica.