Una "aventura" en Fire Emblem Heroes

Apoyo de amistad (Ishtar/Phyria)

A pesar de que ya habían pasado varios días desde que conoció ese lado tan.... brutal de Camilla, Ishtar aun no se recuperaba del todo de aquella experiencia, no era como si no hubiera visto una escena violenta, su tiempo en el ejercito de Friege y las feroces batallas que tuvo que enfrentar como miembro del ejercito de liberación, le hizo ver muchas cosas que hubiera deseado nunca haber visto pero... esto llegó a un nivel que la tomo por sorpresa...

... De verdad ella nunca pensó que los brazos se podrían torcer en semejante ángulo...

... O que las pies pudieran quedar mirando al lado contrario...

... O que una espalda podría emitir semejante sonido al romperse...

O que...

...

...

...

Ishtar tuvo que volver a hacer profundas respiraciones para tratar de calmarse y controlar las nauseas que regresaban cada vez que, aquellos recuerdos atacaban su ya cansada mente.

Lo peor era que toda la situación, ayudó a que ciertos recuerdos que, de alguna manera había conseguido sobrellevar sobre... el casi inhumano trato que le daba su madre a su tía Tailtiu, volvieran a salir de su letargo... recordar los gritos de su tía era una de las tantas cosas que atormentaban su ya cansada alma...

Suspiro al darse cuenta de que hoy sería otra noche igual a las anteriores, sin poder calmar del todo su agitada respiración, mientras observaba el techo intentando calmar sus tortuosos pensamientos, quizás ya era momento de intentar algo nuevo, ya era algo tarde, pero esperaba que los demás entendieran la gravedad de su situación si llegaba a importunar a alguien por accidente.

Decidida se puso de pie y, haciendo todo lo posible por ser lo más silenciosa, salió de su habitación rumbo a la cocina, aunque tenía cierta preocupación de que la vieran en piyama, trato de convencerse a sí misma de que, era prácticamente imposible que alguno de sus compañeros estuviera deambulando por los pasillos tan tarde en la noche.

Una pequeña esfera de magia eléctrica era lo único que la iluminaba mientras se desplazaba por el castillo, pese el tamaño le proporcionaba la suficiente luz como para llegar a la cocina, cuando entro al comedor, no pudo evitar tensarse cuando escucho ruidos en la cocina y, lo que le pareció era un destello luminoso que, no parecía pertenecer a una vela.

Rápidamente se dio cuenta de que aquella luz, no se parecía a la magia de luz que usaba Lady L'Arachel, ni tampoco a la ocasional magia de fuego que usaba Nino... alguien desconocido estaba en la cocina y, aunque no estaba precisamente equipada para una luchar, no podía quedarse con los brazos cruzados y arriesgar la seguridad de sus compañeros.

Mentalizándose para una posible situación de combate y, acercándose tomando toda las precauciones posibles, entro a la cocina lista para atacar al desconocido cuando, se percato de la identidad del invasor.

-¿Phyria?-dijo Ishtar muy sorprendida, ¿Qué estaba haciendo la invocadora a estas horas en la cocina?

-¿Ishtar?-pregunto Phyria un poco extrañada, Ishtar noto que Phyria tenía un racimo de plátanos en la mano y, uno de sus aparatos que generaba una luz blanca-¿También viniste por un bocadillo nocturno?-pregunto Phyria con una sonrisa cómplice.

-N-n-no-dijo Ishtar algo nerviosa, técnicamente no estaba mintiendo porque, era muy diferente comer algo a, ir por algo de beber...-Pero Phyria, ¿No te parece que es un poco tarde para comer fruta?-pregunto Ishtar tratando de desviar el tema.

-¿De qué estás hablando?-preguntó Phyria confundida-Pero si apenas son las once y media-dijo Phyria en tono seguro.

-¿Y-y eso no le parece a usted tarde?-dijo Ishtar muy sorprendida.

-Ishtar, he ido a comer tacos al pastor como a las cuatro y media de la mañana, para mí esto no es tan tarde-dijo Phyria con una sonrisa orgullosa.

-¿Tacos al que...?-preguntó Ishtar, tratando de hacer memoria sobre aquellos platillos de la región de Phyria que mencionaba de vez en cuando.

-Además no me los comeré así, pensaba hacerme un Banana Split nocturno-dijo Phyria con una sonrisa animada.

-C-creo que no debería comer algo tan pesado en la noche-dijo Ishtar soltando un suspiro preocupado, no estaba segura si comer helado a estas horas era una buena idea.

-De todas maneras, ¿Que te trae por aquí?-pregunto Phyria algo curiosa, en especial considerando que la habitación de Ishtar estaba algo retirada del comedor.

-B-bueno yo...-comenzó a decir Ishtar algo tímida, lo último que quería era importunar a alguien con sus problemas.

-Tranquila Ishtar, si tienes problemas para dormir o algo te preocupa, puedes contar conmigo para ayudarte, no serías la primera que me pide ayuda a estas horas-dijo Phyria en tono amable.

-E-es que... no me gustaría molestarla-dijo Ishtar aun apenada, en especial al caer en cuenta de que aun estaba en piyama y, sin bien Phyria estaba en igualdad de condiciones, que su superior la viera con ese atuendo la hacía sentir muy avergonzada.

-Vamos, no tienes porque contármelo si no te sientes cómoda, pero podría ofrecerte algo de compañía y algo que quizás pueda ayudarte un poco-dijo Phyria en tono tranquilo.

Ishtar comenzó a pensar en sus opciones, si bien Phyria había probado ser un personaje de lo más... peculiar, no podía negar que aquella mujer era una persona de buen corazón que, siempre estaba prestando su mano a quienes lo necesitaban ya fueran guerreros de la orden o gente dentro o fuera del castillo.

No estaba segura si sería capaz de hablar con Phyria sobre la razón por la cual aun seguía despierta a estas horas pero, quizás su compañía podría ayudarle a calmarse lo suficiente para regresar a su habitación y, dormir algunas horas antes de ir al pueblo junto con Lene, Nino y Rebecca.

-Está bien, pero debe prometerme que no se quedara despierta tantas horas solo para ayudarme, si está muy cansada en algún momento de la noche, no dude en decírmelo-dijo Ishtar en un tono más sereno.

-Algo me dice que serás tú la que no podrá seguirme el ritmo-dijo Phyria en tono divertido.

Después de dejar la cocina en orden, las dos chicas comenzaron su camino hacia la habitación de Phyria, Ishtar aun tenía sus dudas sobre eso, pero no podía negar que de verdad necesitaba la compañía de alguien para por lo menos, tener aunque fuera una pequeña distracción de sus sombríos pensamientos...

Aunque inevitablemente, no pudo evitar preguntarse, ¿Cómo estaban sus amigos y compañeros de su mundo?, en especial... aquella persona que la ayudo sin dudarlo a pesar de todas las consecuencias que traería traicionar a su padre... y al reino que juro servir...