De mi realidad a la tuya

Que cursi sonó eso

NARRA DRACO

Me subí al árbol huyendo de la molesta de Pansy. Saco una manzana del bolsillo de mi túnica y comienzo a comer.

Veo que a lo lejos se acerca Diane con un libro. Se sienta cerca del árbol en el que me encuentro y empieza a leer. Tomo un pequeño fruto del árbol y se lo lanzo a la cabeza.

Voltea en dirección al árbol con cara de pocos amigos.

-Realmente espero te caigas de ahí, Malfoy.- dice poniéndose de pie y acercándose al árbol.

-Cómo sabías que era yo?- pregunto.

-Quién más querría lanzarme un fruto a la cabeza?

-Buen punto. Ven, sube.- le digo tendiéndole la mano.

-No, me voy a caer.- niega. 

-Oh, vamos! Me subí contigo a ese pollo y no quieres subir conmigo al árbol?

Se queda en silencio por unos segundos pensando en lo que le dije, hasta que lanza un suspiro y me pasa su libro, lo colocó en una rama a modo que no caiga. Me tiende su mano y la ayudo a subir.

-Cómo es que Draco Malfoy quiere que una Weasley lo acompañe?- pregunta mientras se acomoda.

-Resulta que eres la persona que menos me desagrada de Hogwarts.- explico.

-Es un tremendo honor, eh! Qué haces aquí arriba?- pregunta.

-Escapo de Pansy, a veces es demasiado fastidiosa.- comento dándole una mordida a mi manzana.

-Entonces para qué le das alas?- dice y me arrebata mi manzana para darle una mordida.- está rica, me la quedo.

Río y saco otra manzana de mi bolsillo.

-Siempre traes manzanas contigo?- pregunta riendo.

-Sí, por qué?

-Cuando tenga hambre me acercaré a ti. Pero bueno, en lo que estábamos. Si Pansy te parece tan fastidiosa porque le das alas?

-Porque es buena... en ciertas cosas.- contesto con una sonrisa pícara.

Entiende al instante y hace una mueca de asco.

-Joder, Draco! No quería saber eso.!- dice fingiendo arcadas.

Suelto una carcajada y ella me sigue.

Me quedo en silencio durante unos minutos, y suelto un suspiro. Por primera vez no tengo que fingir.

-Es bueno el descanso, no?- dice con una sonrisa comprensiva.

-Si, lo es. Es agotador ser la persona que mi padre quiere que sea.

Su cara se contrae y por un momento noto una pizca de tristeza en su mirada, pero esta desaparece al instante.

-Conmigo no tendrás que fingir... mmm, mírame como tu rinconcito de paz.- dice riendo.

Un rinconcito de paz...

-Que cursi sonó eso.- digo haciendo una mueca.

-Jodete.- contesta y ambos soltamos una carcajada.

Escucho un pequeño crujido de la rama, ni siquiera nos da tiempo de reaccionar cuando ambos caemos al piso.

-Por qué siempre que estoy contigo debo terminar en el suelo?- digo quejándome.

-Por tarado. Lo bueno es que siempre amortiguas mi caída.- dice riendo y me ayuda a levantarme.- ay no! Mi libro.

La veo recoger su libro. O lo que queda de él, las hojas están regadas por todo el lugar, y por si fuera poco, a algunas se las  está llevando el viento.

-Lo siento...- empiezo a recoger las páginas que puedo.

-Descuida, no fue tu culpa.- toma las páginas de su libro.

Veo la portada. Es un libro de cuentos de magia. Lo conozco.

-Debo irme, adiós Malfoy. Y gracias por la manzana.- dice.

Me da un beso en la mejilla y se va.