De mi realidad a la tuya

LAS ENCONTRAMOS!!!!

NARRA ALEX

Me escondo detrás de la puerta de la cocina junto a Nelly.

-Shh.- me dice poniendo su dedito sobre sus labios.

Sonrío y me escondo más, pegándola a mi cuerpo para no ser vistas.

-Las vamos a encontrar!!!- grita Fred.

Nelly suelta una risita y se cubre la boca rápidamente.

-Vamos a encontar!!!- grita Teddy riendo.

Nelly se da vuelta y me abraza la pierna, tratando de no ser vista. Cuando de pronto cierran la puerta bruscamente.

-LAS ENCONTRAMOS!!!!- gritan Fred y Teddy.

-Ahhh!- grita Nelly al verlos.

-Eso no es justo, nosotras teníamos que ganar!!!- digo riendo.

-Será otro día, amor.- contesta Fred rodeando mi cintura con sus brazos, me atrae a él y me da un corto beso.

-Iugh!!- dicen los niños haciéndonos reír.

-Algún día serán ustedes los que estén así!- bromea Fred.

-Ahora que lo pienso, harían bonita pareja!!- continúo, aún en los brazos de Fred.

Los pequeños hacen una mueca de asco.

-Papá dice que los novios son una pérdida de tiempo.- menciona Nelly negando con la cabeza, luego mira a Fred.- eres una pérdida de tiempo.

Suelto una carcajada y me alejo de Fred, tomo a Nelly en brazos.

-Vamos por la merienda?- les pregunto.

-Siii!!!!- gritan los tres.

Fred carga a Teddy y vamos los cuatro, los sentamos en las sillas y yo les reparto la merienda.

Al verlos comer, Fred me abraza por detrás y deposita un beso en mi cuello.

-Estamos haciendo un buen trabajo, no?- menciona.

Sonrío ante su comentario y asiento.- Somos geniales.

Comienza a repartir besos por mi cuello, mientras me abraza más fuerte.

-Deberíamos ir creando los propios, no crees?- me propone.

Me giro y lo abrazo de frente.

-Quieres hijos?- le pregunto.

-No tenía muchas ganas... pero ahora que sé lo que es convivir con niños y contigo. Me encanta tu lado maternal. Puedo cambiar de opinión.- menciona.

Mi lado maternal?

-Lo pensaré...- contesto y le doy un corto beso en los labios. Para luego esconder mi rostro en su pecho.

Tener hijos? Nunca pasó por mi mente la idea de tenerlos, Diane tiene razón ¡lo más hermoso es poder devolverlos!

Pero al ver el lado paternal de Fred, lo maravilloso que fueron estos momentos co  los niños, quizá pueda replantearmelo. 

-Alex!- me interrumpe la voz de mi hermano.

Al voltear lo veo confundido y... asustado?

-Qué sucede?- pregunto.

-Tienes.... cosas de mujeres?- me pregunta y lo miro confundida.

Lo botaron de chiquito... si, eso es!