De mi realidad a la tuya

Es uno de sus poderes...

NARRA DIANE 

-Por qué no me dijiste lo que te hizo Umbridge?- me pregunta Oliver acariciando mi mano.

-Lo podía manejar sola.-susurro cabizbaja. 

-Pero no tienes que manejar nada sola, Diane! Ya no tienes porque hacerlo!!- exclama Oliver enojado. Respira profundo e intenta calmarse.- Amor, no debes seguir pensando que tienes que lidiar con todo sola...ahora yo estoy aquí.-dice más calmado y me acaricia el cabello.

-Estuve años así, mi madre me enseñó que puedo lidiar con todo sola y no necesito de nadie, menos de un hombre.- replico.

-Puedes, claro que puedes. Pero no debes, es demasiado. Prométeme que dejarás que te cuide.- pide. 

-Lo prometo.- contesto suspirando. 

-Ven aquí...- dice y se acuesta en mi camilla, abrazándome.

Dumbledore entra y sonríe al vernos así.

-Si otro profesor entrara, tendrían grandes problemas.- bromea.

-Por suerte ha sido usted.- dice Oliver sonriendo.

-Debemos hablar de lo sucedido, Diane.- añade Dumbledore. 

-Soy un monstruo, sacarán una película de terror sobre mí.- menciono.

-No eres un monstruo... solo, eres diferente. Verás, Diane. Eres la creación más poderosa del universo y ahora que volviste, todo está encajando a la perfección, entonces vas descubriendo tus verdaderos poderes.- explica.

-Y cómo los manejo?- pregunto.

-Qué tienen en común las situaciones en las que se han presentado tus poderes?- me cuestiona Oliver. 

-En la cueva... solo pensaba en proteger a Dumbledore y Harry. Y en el campo solo pensé en Draco, en protegerlo.- suelto.

-Entonces tus poderes surgen cuando sientes la necesidad de proteger a alguien.- menciona Dumbledore.

-Con lo de Draco, también sentiste enojo...- dice Oliver y asiento.

Todos nos quedamos en silencio, pensando en eso. 

-Deberás irte de Hogwarts por un tiempo.- sentencia Dumbledore.

-NO!!- grito.- No no, yo no quiero irme.- niego.

-Oliver te acompañará, estarán en un lugar seguro y ahí aprenderás a a manejar tus poderes.- menciona Dumbledore.- creo que sabes a que lugar me refiero.

-No... pero qué pasará con Draco?!- pregunto preocupada.

-Él estará bien, no lo dejarán solo. Sabes que tus amigos y familia también le han tomado aprecio.- asegura Dumbledore.

Cierro los ojos y pienso en él, no puedo dejarlo sola. 

-Diane?!- pregunta Draco y abro los ojos. 

-Qué haces en la enferme... qué hago en tu habitación?!- pregunto confundida. ¿Cómo llegué aquí?- Astoria?! Ay por Dios... lo siento, lo siento.- digo cubriéndome los ojos.

-Demonios, Diane. Si querías verme así podría ser en otra ocasión.- bromea Astoria y le saco la lengua, aún con los ojos cubiertos.

-Puedes unirte.- sugiere Draco soltando una carcajada.

-Jódanse.- digo e intento levantarme del suelo, pero me siento débil y caigo.

-Diane!- exclama Draco acercándose de prisa. Y me ayuda a levantarme.

-Cúbrete! Cúbrete!- exclamo cerrando los ojos de nuevo.

Les doy unos minutos a que ambos se cambien y luego Draco me toma en brazos, llevándome de regreso a la enfermería.

-Dónde estabas?- pregunta Oliver preocupado.- Cómo te fuiste?!

-Es uno de sus poderes...- contesta Dumbledore sonriendo.