NARRA HARRY
-No debiste defenderme, ahora también te castigará a ti.- menciono y Diane ríe.
-Descuida, fue divertido.- contesta.-Solo... ten cuidado.- advierte antes de tocar la puerta.
-Pasen.- se escucha desde adentro.
Abro la puerta y dejo pasar a Diane primero, ella entra y al entrar yo, me hace gracia ver la mueca que hace Diane al ver tanto rosa.
-Odio a los gatos.- susurra.
-Buenas tardes, señor Potter y señorita Weasley, tomen asiento.- nos indica Umbridge.
Nos sentamos, noto que frente a nosotros hay un pergamino y comienza a hablar.
-Hoy escribirán unas líneas para mí.-indica.
Intento sacar mi pluma y veo que Diane no se mueve.
-Usarán unas plumas que yo les daré.- menciona Umbridge y Diane suelta una risa burlona.
Nos tiende las plumas y estamos por escribir, cuando caigo en la cuenta de que no nos ha dado tinta.
-Deben escribir "No debo decir mentiras"- ordena.
-Cuántas veces?- pregunta Diane.
-Las que sean necesarias para ganarme su respeto.- contesta la profesora Umbridge.
-Necesitaré más pergaminos...- señala Diane sonriendo.
-No nos ha dado tinta.- indico.
-No la necesitan.- dice sonriendo maliciosamente.
Diane y yo comenzamos a escribir, pero me detengo al sentir un dolor fuerte en el dorso de mi mano, al observar, las palabras que escribo en el pergamino, también van quedando grabadas en el dorso de mi mano. Giro a ver a Diane y veo como de un mano, resbala una gota de sangre, la empuña y sigue escribiendo.
-Sucede algo?- nos pregunta Umbridge.
-No creo que le importe, profesora.- contesta Diane dedicándole una sonrisa falsa.
-Entonces sigan.- ordena.
Diane y yo seguimos escribiendo, por momentos me giro a ver a Diane y me preocupa el ver su mano manchada de sangre.
Al terminar el castigo nos ponemos de pie y nos acercamos a la profesora.
-Espero hayan aprendido la lección y saben que muy en el fondo merecían el castigo.- menciona Umbridge sonriendo maliciosamente.
-Valió la pena.-contesta Diane sin inmutarse.
La veo sorprendido, está como si nada le hubiera pasado, aunque su mano chorree sangre.
-Aprendió la lección, señorita Weasley?- pregunta.
Diane sonríe de forma burlona y la tomo por el brazo.- si la aprendió, profesora. Ya nos vamos, con permiso.- respondo y me llevo a Diane afuera de la oficina.
Diane se suelta de mi agarre y me mira.
-Estás bien?- me pregunta.
-Yo? Tú escribiste dos pergaminos ¡al derecho y al revés!- exclamo mientras caminamos.
-Y aún así no aprendí la lección ni tiene mi respeto.- se burla.-en serio, estás bien?
-Si, y tú?- pregunto.
-En perfecto estado... no le digas a nadie, por favor. Menos a Draco y a Oliver.- me pide y se va sin más.
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De mi realidad a la tuya
Fanfiction¿Cuántas veces vas a tratar para estar con la persona que amas?