Eres lo que más amo en el mundo

241 16 0
                                    

-Me alegra que vayas a salir con ese chico.- dice mi abuela. 

-No es una cita, no te emociones, es una cena de trabajo a la que nos envió el director.- indico.

-Por qué eres tan terca?- pregunta rodando los ojos.

-Porque me parezco a ti.- contesto riendo. 

-Debes darte una oportunidad... o al menos intentar.

Niego con la cabeza y la volteo a ver.- no pienso estar con nadie.

-Volverás a hacer shifting?- pregunta. 

Vuelvo a negar con la cabeza.- No, no puedo volver. No puedo ir y venir cada que me plazca, no puedo ilusionar a Oliver. Puedo estar con él durante un tiempo y luego volver y... cada despedida será más dura. No puedo hacerle eso. No es justo.- aseguro. 

-Pamela, ya vino por ti el chico.- anuncia mamá. 

-Gracias.- digo y sale. 

Tomo mi bolsa y me observo por última vez al espejo, llevo un vestido azul marino con unos tacones a juego. Mi cabello recogido con dos ganchitos, perfectamente acomodado. 

-Vuelvo más tarde, te amo.- le digo a mi abuela y salgo. 

-Pamela.- me llama y regreso. 

-Qué sucede?

-Te amo muchísimo...- me dice. 

La abrazo y beso su frente.-Yo te amo más, eres lo que más amo en el mundo.- aseguro. 

Al salir veo a Erick recostado en la puerta de un auto. 

-Y tu motocicleta?- pregunto.

-No iba a permitir que pasaras frío y traje mi auto. Estás hermosa.- dice cuando me acerco.

-Gracias.-contesto. 

Me abre la puerta del copiloto y entro. Maneja con cuidado hasta llegar al restaurante. 

-Estás lista?- pregunta. 

-Nací lista.- afirmo y entramos. 

La cena transcurre tranquila y logramos nuestro objetivo, el ministerio de educación ha aprobado el nuevo método de enseñanza que propusimos y planeamos emplear en nuestro colegio. Al terminar nos despedimos y me voy junto a Erick a su auto, conduce por un rato hasta estacionarse frente a mi casa. 

-Eso fue increíble, nos lucimos.- afirmo.-gracias por venir por mi y traerme de vuelta. 

-Si... hacemos un equipo increíble, no crees?- dice viéndome fijamente. 

-Ammm, claro. Todos los miembros del colegio hacemos un equipo increíble.- digo.-debo irme, feliz noche. 

Intento bajar de su auto, pero pasa su mano delante de mí volviendo a cerrar la puerta.

-Por qué siempre huyes, Pamela?- me pregunta. 

-No entiendo a qué te refieres.- digo. 

Suelta un suspiro y se intenta acercar a mí. Pongo mis manos sobre su pecho alejándolo. 

-No puedo...- digo.

-Pamela, me gustas. Hace 5 meses iniciaste a trabajar con nosotros y el tiempo que he pasado contigo, aunque tú no hayas permitido que sea más que una amistad. Ha hecho que en mí crezca un sentimiento hacia ti.- confiesa. 

-No puedo estar contigo...- admito y me ve nostálgico.- Eres un gran chico, pero no puedo estar ni contigo ni con nadie. Estoy enamorada de alguien más.

-Él está contigo?- pregunta. 

Niego con la cabeza.

-Es un bobo.- afirma.

-No le digas así, no podemos estar juntos. Y la que se alejó fui yo. No él.- le reprocho. 

-Si lo amas, porque te alejaste?- pregunta. 

-Porque quiero que sea feliz y conmigo no podrá.

-Entiendo... Pero no me rendiré, Pamela.- asegura. 

-Buenas noches, Erick.- me despido y bajo de su auto.

Al entrar a casa me quito los tacones.

-Ya volví.- aviso. 

Entro a mi habitación y los tacones caen al piso. 

-NOOO!- grito.

De mi realidad a la tuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora