Libro de historias cortas sesshome y otras parejas 2 (Actualizaciones semanal)

#10 NO SABES CUANTO TE QUIERO

Tema sugerido por mi amiga oshiokinomoto (les aconsejo pasarse por su perfil, tiene historias de 10) espero que les guste.

Capítulo 1.

Sesshomaru ve la sonrisa burlona de Bankotsu, el tipo era un completo idiota despreocupado y el único que podía sacarlo de su aburrida rutina de universidad, de hecho, desde que tiene memoria, Bankotsu ha sido su amigo siempre y ahora... siempre ha estado allí para lo que fuera.

-¡Vamos hombre, no me veas así!. - sonríe de nuevo ahora nervioso. -Di algo.-

Los clientes entran y salen, los meseros atienden, la campanilla de entrada no para de sonar y ellos están callados.

Cuando Bankotsu pensó en la mañana confesarle a su único amigo su inclinación sexual y sus sentimientos románticos hacia él, no creyó que le causaría tal impacto, ¿acaso Sesshomaru nunca notó que era gay?, ¿no sabía que estaba enamorado de él desde la secundaria?, era bastante obvio.

-Lamento no haberlo notado antes.- dijo el albino algo fuera de sí.

¿Qué se suponía que debía decir o hacer?, se le habían confesado antes tantas mujeres y hombres pero nunca alguien que le importara tanto como Bankotsu, ¿acaso el hecho de preguntarse qué sentía al respecto ya era un indicador que de hecho, no quería perderlo?, no, no deseaba perder su amistad, ¿eso qué significaba?.

-Bueno, realmente creí que al menos sabías que era gay- miró la ventana, estaba seguro que si él fuera una mujer... Sesshomaru habría recibido sus sentimientos, nah, solo se engañaba, Sesshomaru amaba o no, no había más. -Olvidalo. - susurró herido, no deseaba perderlo pero estas cosas pasan, la vida es cruel a veces, ni hablar del amor, pero él tenía una meta fija en su vida, él sabía que deseaba ser una mujer y lo sería.

-No tengo una respuesta en este momento. - dijo poniéndose de pie, era tarde para su clase y su carrera era muy importante.

Bankotsu asintió desilusionado.

-Te daré una respuesta mañana.- se fue dejando a su amigo colgado de una pequeña esperanza.

-Eres un bastardo- lo vio caminar con ese porte elegante hasta perderse entre la multitud. -, ¿por qué no me rompes las ilusiones de una vez?.- sonrió, quizás y solo quizás...

La respuesta llegó efectivamente al día siguiente, Taisho rechazó los sentimientos de su amigo aunque le aseguró que su amistad no se vería perturbada por nada, aunque agridulce, Bankotsu lo aceptó pero sin embargo no se rindió, sabía que él le apreciaba y podría convertir esos sentimientos en amor algún día, sabía que podía.

****

Seis años después.

-Sesshomaru- Bankotsu estaba harto de que su novio se quedara dormido hasta tarde por trabajo, sabía que él se esforzaba mucho para seguir en ascenso en su brillante carrera como arquitecto pero trabajaba demasiado. -¡Sesshomaru!.- gritó.

El hombre finalmente despertó.

-¿De nuevo me quedé dormido mientras trabajaba?. - menciona lo obvio.

-Si, y ya se me hace tarde para el trabajo. - mira su reloj de pulso algo apurado.

-Me encargaré de la casa, ve tranquilo. - revuelve sus cabellos cansado.

Bankotsu sonrió, él era el mejor amigo y novio que pudo haber pedido, bueno, apenas tenían un año de relación, pero Sesshomaru demostró ser todo lo que él esperaba y más, lastimosamente aún sentía una pared entre ellos que no podía siquiera ver; se fue al trabajo, necesitaba ahorrar mucho dinero para su pronta cirugía, aún no se había sometido a los exámenes rutinarios pero en dos meses más o menor iría a la segunda cita con la doctora y comenzaría de verdad el proceso.

****

Sesshomaru entró al apartamento cansado, últimamente ni las tazas de café cargado le evitaban ese bajón de energía, solo deseaba poder contratar más personal pronto. Al entrar, se encontró con un verdadero desastre, se impresionó, ¿acaso habían entrado a robar?.

Caminó cauteloso hasta la habitación donde escuchaba ruido aún, abrió la puerta listo para enfrentarse a lo que fuera, no esperaba ver a su novio histérico destrozando todo a su paso.

Taisho fue hasta Bankotsu, lo tomó con fuerza por los hombros y le sarandeo para que entrará en sí, el joven se resistió y aunque su fuerza era casi igual a la del albino, nunca había podido ganarle, fue sometido por su novio y al verse entre los brazos de Sesshomaru finalmente se quebró, rechino los dientes y lloró.

-Bankotsu, ¿qué sucede?. - pregunta con el alma al filo de la infinita preocupación.

-Hoy fui a mi cita médica... - le tembló la quijada. -, mis resultados no fueron favorables. - mordió su labio con tanta fuerza que un hilo de sangre se asomó por la comisura de su boca.

Sesshomaru y él terminaron en el suelo lleno de objetos destrozados, papeles y más.

Se miraron a los ojos por un instante, ambos buscando las palabras correctas para proseguir o preguntar, para explicar, para saber, para entender. Bankotsu limpió su sangre, bajó la vista, ya nada le podía doler más que tener que decirle a quien ama lo que vendría.

-Aparentemente tengo cáncer pulmonar. - dijo al fin tratando de sonar normal.

Sesshomaru retiró sus manos de él, lo observó por unos minutos casi eternos, sabía que esas palabras significaban mucho, sabía que de ahora en más, todo sería diferente.

-¿Te hicieron una biopsia?. - indaga sentado en el suelo revolviendo sus cabellos. ¿Ahora qué?, ¡maldición!.

-Debo ir mañana para que me hagan eso, pero el médico estaba casi seguro. -

Sesshomaru asintió, él era joven y fuerte, la medicina estaba muy avanzada, tener cáncer no significaba la muerte, él estaría bien, ¿verdad?. Le tomó la mano en señal de apoyo y se quedaron así por mucho tiempo, en silencio, calmando la tormenta dentro de cada uno, aquella pared que hasta ahora los separaba comenzaba a desmoronarse.

Continuará...