Tu Reputación 18

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Lamento que no hubiera capítulo sábado y domingo pero me tomé los días libres para recargar batería 🥺

CAPÍTULO XVIII 

Hoy, esta noche y precisamente ahora sería cuando su plan tomaría forma. Koga no comprendía que su oportunidad de tener a la mujer que ahora creía amar se perdió entre sus propios prejuicios, él mismo antepuso las habladurías y la mala reputación de la joven, sus sentimientos pudieron tan poco ante la posibilidad de tenerla a su lado con todo y chismes y fealdad; mató su coraje y la frase "es como mi hermana" enterró bajo tierra su destino junto a ella, su vanidad lo cegó, prefirió casarse con su prometida y ahora se dedicaba a hacerla sufrir golpeando su ego de mujer al no dedicarle ni una sola mirada. Ahora, entre el mar de invitados, Ayame observa desconsolada como su esposo se dedica a ir tras otra mujer invitandole a un baile mientras ella permanece sentada junto a Lady Irasue y Lady Midoriko conversando del exitoso baile y soportando estoica su corazón roto. 

Sesshomaru arrugó en entrecejo irritado, el pusilánime de Wolf se atrevió a escribir su nombre en la cartilla de Kagome dos veces cuando claramente era totalmente impropio al no ser su esposo o de la familia inmediata de la dama, ella no quiso hacer un escándalo de eso y calló dejándolo ser por ahora, porque lo iba a reprender, él no era así y debía respetarla como la mujer casada que era. El calor de la fiesta aumentaba, las arañas iluminan el salón de baile, la orquesta se prepara y las parejas se colocan para comenzar una cuadrilla; un carruaje para frente a la mansión y el empleado abre, Inuyasha iba muy elegante ocultando tras las ropas la podredumbre que oculta su personalidad tan endeble, incapaz de controlar sus viciosos; entra en el salón caminando cual pavo real llamando la atención, buscó con la mirada a Kikyo, debía estar en ese baile. Tenía ganas de cogersela de nuevo, ella era la única que le aseguraba sexo más o menos pasable sin enfermedades de por medio, ya uno de sus compañeros de juerga murió por esas nefastas causas y el miedo le traía en la necesidad de buscar a la tonta que besaba sus pies por amor. Escuchó una voz conocida y detuvo su andar, trató de acomodarse tras una columna, deseaba saber lo que decían puesto que la palabra "Kikyo" voló a sus oídos. 

—Así es querida— dice lady Higurashi jovial en tertulia con una amiga. —, mi querida Kikyo se ha casado en Gales con lord Spider, ¡el heredero del Marqués de Shikon!. — el orgullo y la ambición eran palpables. —Están en buena esperanza de su primer hijo, esperamos que sea un niño, usted sabe...— 

Las mujeres se alejaban e Inuyasha no salía de su estupor, ¡maldita ramera!. ¿Cómo se atrevía a buscarse otro amante e inventar era hijo de ese imbécil?. Decidió entonces acercarse a Lady Higurashi y preguntar por la ubicación del "matrimonio" Spider. Kikyo salió más astuta de lo que imaginó, lo reconocía, pero no dejaría su muñequita se escapara, iba a llevársela y encerrarle en algún lugar para que le satisfaciera a él y solo a él. 

Sesshomaru no se enteró que su hermano pasó justo tras de él, estaba más concentrado en no partirle los dientes al maldito de Koga, el muy idiota se atrevió a invitarle después del segundo baile con Kagome a ir a la biblioteca para "hablar ", aunque ya sabía que no iban a hablar precisamente como dos caballeros, iba a ir directo a hacerle perder cada diente de esa sonrisa que le dedicaba a su esposa. 

Desde el rincón donde observa a Taisho y los bailarines, Ayame sintió que algo no andaba bien, era demasiado extraño el comportamiento de su esposo y cuando le vio terminar su segundo baile con Kagome, despedirse de ella para luego interceptarla donde su esposo no le miraba por la multitud y llevársela... algo en ella se encendió, corrió con Lady Midoriko e Irasue para pedirles le acompañaran a la planta alta ya que pensaba su periodo había llegado adelantado, ambas mujeres se apresuraron a ir con ella y socorrerla. Vieron a Koga y Kagome caminar a la biblioteca, él casi le arrastraba cosa que le pareció curiosa a las mujeres, Ayame les pidió seguirlos y aunque las damas se rehusaron, al ver la cara de preocupación de la chica y la situación tan rara, decidieron ir con ella. En el salón que abandonaron, Lady Higurashi se extrañó de no ver a las otras tres damas de su grupo cuando volvió con el ponche que fue a buscar, se sentó imaginando su vida ahora que tenía a sus dos hijas casada y con buenas conexiones para pautar un matrimonio ventajoso para el menor Higurashi, no se dio por enterada de la presencia de Inuyasha hasta que él le habló. Ambos conversaron amenos y la mujer soltó la lengua de la dirección de su hija mayor, sabía que el joven Inuyasha era amigo de Naraku y pensó lo preguntaba por esa razón, no creyó la desgracia les alcanzaría por ese único comentario chismoso. 

Libro de historias cortas sesshome y otras parejas 2 (Actualizaciones semanal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora