Armanway, lobos solitarios (Armanway/Volkway)

¿Vendrá ese capullo realmente?

(Conway)

Ya había llegado a casa hace un buen rato, y había aprovechado para darme una ducha y ponerme cómodo, el pijama.

Hacía tiempo que no pasaba por ahí, pues me estaba quedando con Volkov, pero quería comprobar si realmente ese capullo vendría arrepentido a mí.

La verdad me gustaba que me rogaran, y yo creo que me lo merecía, de todos modos, aunque poniéndome en su lugar podía entender a medias que estaba ocupado, no había razón para no apoyarme.

Y más aún cuando me encuentro sensible por llevar a nuestro hijo.

Aunque no iba a negar que la idea de que viniera a rogarme no me había disgustado, escucharía lo que me diría y si no me parecía una suficientemente buena razón le mandaría por donde había llegado.

Pues antes que pareja tengo mi orgullo, que no era precisamente pequeño. Y con Volkov, yo estaba muy cómodo.

Creo que Grúas se merecía un escarmiento, de todos modos. Y cuál mejor que estar con mi mejor amigo, que él al menos me apoya, antes que con él?

Pero debo aclarar lo siguiente:con Volkov estaba porque le quería mucho, y no quería que estuviera solo en esos momentos tan complicados para ambos, no por venganzas ni mierdas. De hecho, ya comenzaba a preocuparme por él, y los pensamientos de regresar a su casa y dejar todo atrás estaban en mi mente.

Pues Grúas estaba tardando, no que llegaría temprano?

Si quería recuperarme, no le estaba saliendo para nada bien la jugada.

Le mandé un mensaje a Volkov, para ver como estaba. Su turno ya habría acabado.

-<<Volkov, qué haces?>>

-Me respondió al instante.

-<<Leyendo un manga.>>

-<<Cuál manga?>>

-<<Overlord.>>

Medité, la verdad tenía sentido, ya que ese ruso estaba muy enganchado a esos mangas, era una especie de obsesión.

-<<Si es que eres un puto otaku de mierda>>

-<<Venga, anda, cálmese y revise su marcapasos>>

-<<Menudo capullo>>

(Volkov)

Estaba en casa leyendo un manga, cuando me llegó un mensaje de Conway.

Supe que era suyo de inmediato, ya que había puesto un distinto tono para él.

Yo no solía responder a nadie cuando me encontraba viendo animes o leyendo mangas, mi tiempo libre era mi tiempo libre.

Pero al oír ese tono, lo primero que hizo mi mano fue agarrar el móvil y desbloquearlo, para entrar al chat de aquel hombre.

Hablamos un rato, y luego, decidí preguntarle qué hacía, ya que no quería que andara por allí a estas horas, era peligroso.

Ya en ocasiones había estado en ese árbol en el que estaba ella enterrada hasta las tantas y ahora, en su estado, no se lo iba a permitir.

Y tampoco iba a negarlo, no queria que sufriera, y mucho menos en soledad y ahí afuera.

-<<Usted qué hace, ya salió de servicio?>>

-<<Si salí. Y nada, en casa, luego probablemente valla a verte>>

-<<Está bien, ya sabe que aquí estaré. No me voy a mover en toda la noche, venga cuando quiera>>

-<<Iré para que durmamos juntos>>

Mis mejillas blanquecinas se tornaron a un tono rosado leve, quería dormir conmigo?

-<<De acuerdo, en este caso le esperaré hasta que venga para que podamos dormir>>

Intenté sonar lo más tranquilo posible, ya que estaba en medio de un tremendo pánic.

Me respondió, y agarré el móvil de nuevo, pues estaba tapando mis mejillas al sentir que ardían.

-<<Muy bien, princesita, así me gusta>>

Joder...

Opté por simplemente limitarme a responder algo sencillo y breve.

-<<пиздеть вы>>

(Conway)

Al ver su insulto eché a reír. Al menos sabía que se encontraba bien, ya estaba menos preocupado.

Mis intenciones era solamente aclarar las cosas, yo iría a dormir con Volkov.

De repente, el timbre sonó, y dejé mi móvil a un lado, pues estaba revisando twistter, ya que llevaba algo de tiempo siento trending topic. Yo y Volkov. Como pareja.

Me levanté a abrir la puerta y allí estaba, ese elegante Armando pidiendo perdón con la mirada.

Llevaba un traje, con la americana y todo. Qué nivel.

Al verlo, solté una carcajada.

Me miró, preocupado al pensar que no le iba a perdonar.

-Anda que Nadando si hace lo que dice. Me cae bien ese capullo.

-Venga, Jack, que yo estoy muy arrepentido y realmente quiero tu perdón, porque te amo.

-Sí claro, yo también. Pero me has hecho daño.

-Y lo siento mucho, darling. Prometo que no volverá a ocurrir.

Me quedé unos minutos en silencio, reflexionando mientras él miraba mis facciones, analizándolas.

Miré el ramo de flores que llevaba en sus manos.

-Rosas. Simbolizan un nuevo comienzo, verdad?

Asintió al oírme.

-Acepto tu nuevo comienzo, saldremos, pero sin vivir juntos, que no puedo estar siempre aquí, debo ir con Volkov.

Esperé a que se oponiera a lo de Volkov, pero asintió.

-Estoy agradecido de que me perdones.-me rodeó con sus brazos.

-Venga, anda.-le abracé también y le di unas cuantas palmadas en la espalda, luego, corté el abrazo.

Agarré las flores y le di un pequeño pico en los labios.

-Debo irme, ya nos veremos, vale?

-Vale, darling. Nos veremos. Te amo. Os amo a ambos, en realidad.

-Yo también.-miré sus ojos unos instantes y cerré la puerta.

Luego de poner las rosas en un jarrón con agua con azúcar, salí de casa y fui hacia la de Volkov.

Al llegar, toqué la puerta.

Me abrió y me dejó pasar.

-Haberme avisado para que fuera a buscarte, la noche es peligrosa, y ya es muy de madrugada.

-No es nada, coño, sé defenderme.

-Pero estás delicado, pero bueno, gracias por venir. Y en pijama.-rió al verme.

-Coño, así me ahorro cambiarme, ruso capullo.-reí, no me había dado cuenta.

-Bueno, no importa, debes descansar, ven.-le tendí mi mano.

Tomé su mano para seguirle hacia la habitación. Me ayudó a acostarme.

Palmeé un lugar a mi lado para que se acostara y me moví para darle la espalda, de lado estaba más cómodo.

Pasó su brazo por mi pecho abrazándolo, y se acercó a mí.

-Pues si que hay confianza, no, Conway?

-No sabes cuánta, Volkov, no sabes cuánta.

-Me alegra que sea así.

Asentí y cerré mis ojos.

-Te aprecio, Volkov.

-Yo igual, buenas noches, Jack.

-Buenas noches, Víktor.

Y terminamos durmiéndonos.