La mosca

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(Conway)

-<<Grúas, podemos vernos?>>

No podía dejar de observar ese mensaje, agarraba mi teléfono con ansias, esperando una respuesta rápida, como esas que solía darme.

Cuando se tardaba tan poco en contestar me hacía sentir alguien muy importante, pareciera que dejaba cualquier acción de lado para darme respuesta.

-<<En unos minutos estoy en tu casa, antes debo tomarme unos supresores, estoy en celo>>

-<<Está bien, yo te espero>>

Dejé mi teléfono móvil a un lado, siendo consciente en mi mente de como los minutos pasaban.

De un momento a otro, la textura lisa del techo que cubría mi cabeza se veía interesante, yo solo quería distraerme, calmar esa ansiedad que me consumía mientras esperaba a ese hombre.

Enfocar mi vista en un punto fijo ayudaría, o eso pensaba.

Pero, qué punto podría usar?

Empecé a escuchar un pequeño zumbido tras mi oreja, un pequeño animal de patas negras y peludas se hallaba en esa zona, cómo no, tocando los cojones.

Al menos observar a ese animal dió sus frutos. Mi mirada pasaba de un mueble a otro, siguiendo ese ser halado que con esos ojos no parecía tener un campo visual muy amplio.

En mi cabeza solo resonaban esos "zzzz" del insecto, y la dificultad de encontrarlo era nula, mi mente ya estaba totalmente concentrada en la mosca.

Un sonido procedente de la puerta me hizo salir de mis pensamientos, perdí la mosca.

Me levanté de mi asiento, tomando de un sorbo la taza de café que se encontraba sobre la mesa, y abrí la puerta de casa, encontrándome con un Armando que me traía un pequeño obsequio.

-Buenos días, Jack, cómo descansaste? Te he traido algo, imaginé que podrías tener hambre.-pasó a la casa y colocó sobre la mesa la abultada bolsa, en su interior había todo tipo de dulces y frituras, y todo para mí solo.

-Bueno, bueno ya veo que nos vamos entendiendo. Por tu culpa perdí a mi mosca, pero si me traes comida te perdono, si no, ya te habrías ganado un porrazo.

-Estamos agresivos hoy, no?

-Agresivo yo? Una polla, ahora siéntate.

Me hizo caso, sentándose en una silla de la mesa de la cocina, yo en cambio, preferí tomar asiento en la encimera.

Sus dos orbes verdosos cual menta se clavaron en mí y en mi vientre.

-Imagino a qué se debe esta reunión.

-Menos mal, al menos piensas. A ver, dime para qué cojones te he mandado venir.

-El tema es que aún debíamos de hablar sobre lo que habíamos acordado del calaveras, probablemente esté squí por eso. O no es así?

-Son varios factores los que me llevaron a solicitar tu presencia. Uno era ese, otro que te extrañaba y el último que sabía que en estas fechas estabas en celo y solo quería tocarte los cojones. Y más te valía no estarlo pasando con otro omega.

-Joder, Jack, que tóxico eres. Me encanta.

-Vete a la mierda.

-Pero ten presente que yo nunca me atrevería a hacer algo así, por algo te elegí como mi omega.

-Ya veo.-crucé mis brazos.-y prosiguiendo con el tema más importante, has hablado con los tuyos?

-Claro que he hablado...digamos que no fue tan mal como esperaba...

*flashback de Armando*

-Entonces quieres que nos rebelemos contra nuestro líder para salvar al jefe del bando contrario?-habló Manolo, rompiendo el silencio que se había formado en la sala.

-Efectivamente.

-Pelo vamo' a vel, Almando...tú ele bobo? Cómo vamo' a salval al Conflei?

-Os estoy pidiendo esto como un favor personal, es importante para mí su bienestar.

-No e' culpa nuestla que Almando sea un malicón y esté enamolado del Conflei.-alegó Yun.

-Yo entiendo al boss... no hay nada de malo en sentir cosas por alguien, verdad chinito mío?-apoyó su mano en el muslo ajeno.

-EEEHHH MALICÓN.-saltó de su silla.

Las risas inundaron la sede, pero poco a poco, recuperamos la seriedad.

-Entonces qué pensáis?

-Nos podemos meter en un gran problema si nos rebelamos contra el Calaveras, ya sabes el poder que tiene, y nos puede reemplazar perfectamente.

-No le intelesa, nunca encontlalía a alguien tan sensual como yo.

-Confirmo.-rió Tonet.

-Joder.-reí levemente.

Y ahí acabó nuestra conversación, ahí me di cuenta de el terror que ese hombre podía infundir.

*fin del flashback*

-Vamos, que no conseguiste absolutamente nada, no? Te tienen cogido por los huevos.

-Algo así.

-No te preocupes por mí, yo me sé defender.

-Claro que me preocupo, estás delicado y mi obligación es cuidarte, ya te infringí demasiado daño.

-Anda, déjate de mariconerías.

Se levantó, y caminó hacia la encimera, se posicionó frente a mí, pasando sus brazos por la zona de mis costados, proporcionándome así bastante calor humano junto con ese reconfortante abrazo.

Inconscientemente, me agarré a él, cerrando mis ojos debido a la relajación.

-No te preocupes, Jack, yo voy a ocuparme de solucionar todo.

-Más te vale, Grúas.

-Más me vale...a mí me das más miedo tú que el Calaveras...

-Me parece muy correcto eso.

-Aunque sabes lo que más miedo me da en estos momentos, Jack?

-El qué?

-Perderte.

Y se lanzó a plantar un beso tierno sobre mis labios, posando sus manos en mis mejillas y dejándome caricias,  escaneando mis expresiones con su mirada tranquilizadora.

Armanway, lobos solitarios (Armanway/Volkway)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora