Un golpe de suerte

Capítulo 48.

Ya han pasado dos días. Dos días horribles en los que no he sido capaz de dejar de llorar. Jamás había sentido tanto dolor y tanta traición. Me odio por haberme creído las palabras de Caleb, por haber pensado que de verdad él podría cambiar por mí.

Martina no ha salido de mi casa en ningún momento, se ha quedado metida en la cama conmigo estos dos días, consolándome y hablando conmigo. Manu y Sara han intentado también ayudarme, aunque la compañía de mi primo me recuerde lo que me hizo, he agradecido también que haya estado conmigo.

Sorprendentemente mi madre también ha venido de Londres a verme. Ya se ha enterado todo el mundo de lo mío y con Caleb y de todo lo que ha pasado. Se encargó Manu de contarle a la gente lo que estaba pasando cuando volví a casa hecha un mar de lágrimas.

Ahora mi familia odia a Caleb. Ya no soy solo yo, ahora también mi familia. La relación de Manu y Caleb se rompió cuando aparecieron Philip y Angie en mi casa, pero ahora, Manu detesta a Caleb, antes solo era Caleb quien lo detestaba a él, ahora ambos están en el mismo punto.

Estos días Caleb se ha intentado poner en contacto conmigo, a través de llamadas, de mensajes... Pero no he respondido a ninguno. También llamó a Martina quien le dejó muy claro que no volviese a molestarnos a ninguno.

Mi madre entra a mi habitación y Martina se incorpora en la cama. Yo estoy medio dormida pero oigo perfectamente la conversación de ambas.

-¿Cómo está?-le pregunta mi madre.

-Solo llora. Ahora parece que está más tranquila y está dormida-le responde Martina.

No quiero que sepan que estoy casi despierta y las oigo, porque seguro que mi madre me atosigaría a preguntas y es lo que menos quiero ahora.

-Ese chico...¿La ha hecho daño verdad?-pregunta mi madre.

-Tu hija le ama, le quiere muchísimo y él es una persona que no está acostumbrada a amar a nadie, no ha tenido una vida demasiado buena y esto le ha venido grande. Ella es demasiado buena para Caleb y él la ha destrozado desde que se conocen, pero hasta yo pensaba que había cambiado por tu hija, pero no ha sido así.

-Cloe lo ha pasado tan mal...Ha sufrido tanto desde que es pequeña. Pensaba que al venir a Barcelona su vida iría mejor, pero ha sido todo lo contrario. Ese chico ha terminado de matarla en vida-oigo como la voz de mi madre se desgarra y comienza a llorar.

Me incorporo en la cama y miro a mi madre.

-Mami...Ven aquí-la digo abriendo mis brazos.

Mi madre se tumba encima mío y llora desconsoladamente.

-Hija, tienes que volver conmigo a Londres, no puedes quedarte aquí, no te hace bien todo esto.

-No quiero volver a Londres, allí no tengo nada, aquí tengo a Martina-digo mirando a mi amiga.

-Martina puede venir a visitarnos todas las veces que ella quiera, pero tienes que venir conmigo a Londres-dice insistente.