Sunoo, el chico flor ⪼ SunSun

30.

Uno sabe que está en el lugar correcto cuando no desea estar en ningún otro sitio en el mundo. No me cambaría por nadie y jamás cambiaría las semanas que he pasado al lado de Sunoo desde que hemos vuelto a empezar.

—Son las que marqué, amor.

He decidido buscar un empleo para demostrarle a Sunoo que yo soy alguien capaz y que haría que se sintiera sumamente orgulloso de mí. El problema está en que no sé si la "pasión" y el "trabajo" pueden combinarse bien, es decir, ¡parecen antónimos! Creo que son palabras que no combinan en lo absoluto y no estoy seguro de poder hallar mi pasión buscando un empleo.

Sin embargo daría lo mejor de mí, porque incluso Sunoo ha marcado varias oportunidades en el periódico para que pudiera tomar una decisión más acertada.

—¿En serio marcaste la de "se solicita secretaria"?

—Las de rojo son las tuyas, esa la marqué para Suzy.

—¿Suzy quiere ser secretaria?

—Sí, es lo más decente que aceptó después de asistir al casting para ser un árbol en una obra de teatro.

—¿No quedó?

—No, se movía mucho.

Lastimosamente todos mis amigos tienen algo que los diferencia de los demás, bien, admitámoslo, están algo idos pero son buenos chicos. Suzy debería estar trabajando en un lugar decente que le pague lo que se merece, no obstante está ahí, soñando con cosas extrañas que le llenan de alegría. Sí, somos idénticos.

Dejé de lado el periódico para subir el cierre de mi pantalón y arreglar los bolsillos. Entretanto desvié la vista hacia el anuncio en rojo que resaltaba en el periódico: "Se solicita fotógrafo y editor para trabajo eventual. Buena remuneración", que por supuesto creí absurdo porque yo no era bueno en eso, Sunoo sí, yo no.

—¿Estás listo?

Mi novio apareció en el marco de la puerta y me regaló una sonrisa dulce antes de acercarse a mí para revisar que me encontraba "presentable". Aproveché su distracción para robarle un par de besos, en lo que él deslizaba sus dedos por mi chaqueta para que ésta no tuviera alguna arruga rebelde.

—Algo me dice que... encontrar algún empleo será difícil.

—No quiero que te presiones con conseguirlo, recuerda que vas porque quieres encontrar algo que te apasione.

—Ush, me gustas tanto...

—Amor...

Sunoo se sonrojó ligeramente cuando abracé su cintura y admiré sus ojos sin perder la cercanía entre nosotros.

—Puedo tardar en regresar.

—Lo sé.

—Y ya que no te veré en mucho tiempo, ¿puedes recompensarme al regresar?

—¿Recompensarte?

—Sí, ya sabes, podemos estrenar la nueva alfombra de doraemon — cofcofmisuperhéroecofcof— y romper nuestro record de la tercera ronda a una cuarta.

—Eres bastante atrevido.

—Lo sé. ¿Entonces qué dices chiquito?

Dejé un par de besos sobre su cuello para convencerlo de aceptar mi excelente idea, él evidentemente empezó a caer cuando soltó esas risitas nerviosas que suele soltar antes de responder con un "sí, amor" a mis propuestas de coger.

—Que sí, amor.

—Vale —haré todo lo posible por regresar temprano—, te veré después, bebé.