Sunoo, el chico flor ⪼ SunSun

29.

Wonyoung llegó cargando una enorme bolsa de cosas para la cena, dijo que tenía un plato en mente y que prepararía con mucho cariño para nosotros, aunque después se olvidara de mí y dijera que el plato era especialmente para Sunghoon.

Sunghoon se transforma cuando llega Wonyoung y yo desaparezco.

—Steak diane, ese es el nombre del plato que quisimos probar en Chicago, Hoon.

—¿Ese es el nombre? Vaya, si sabe tan bien como suena será grandioso.

—Claro que sabe tan bien como suena. —Ella abrió la bolsa y sacó los ingredientes sobre la mesa, ingredientes que yo nunca había visto en la vida.— Este filete es el mejor de todos, fue exclusivo para mi familia y esta porción para mí, porque ya planeaba prepararte esto, Hoon.

Ellos sonreían abiertamente . ¿Cómo que filete exclusivo?

—No debiste molestarte tanto, Wonyoung.

—¿Cómo que no? Tú querías comerlo y yo aprendí a hacerlo. —La emoción brillaba en sus ojos.— Soy la persona más feliz en hacerlo.

A juzgar por los ingredientes al menos todos se pagó en dólares, muchos dólares, Wonyoung no estaba de broma.

—Gracias.

—Vale, pues vamos a comenzar. ¿Sunoo, quieres ayudarme? —Me preguntó.

—Claro. —Bueno, una receta más a mi memoria.

Ella sacó los utensilios de los lugares adecuados, como si supiera exactamente dónde se encontraban. Puso la sartén en el fuego, agregó el aceite que compró que tenía una botella metálica y pinta de fina, luego puso la mantequilla y los tres cortes de filete condimentados que trajo "exclusivamente" para este momento, dejó que se cocieran hasta que el acabado quedara dorado y casi terminado. En otra sartén a fuego lento coció los champiñones en trozos que por supuesto ella cortó, porque hasta ese momento no dejó que tocara nada. Giré, Sunghoon estaba muy entretenido bebiendo su yogurt de soya.

Luego añadió caldo instantáneo a los champiñones, salsa sintética y crema de champiñón instantánea. Apagó la sartén de la carne y elevó el fuego de la otra. Se movió con calma hasta Sunghoon, dejó un plato de zanahorias y algunos vegetales.

—¿Quieres ayudarme con esto? —Le preguntó.

—Claro. —Sunghoon dejó su yogurt de lado y tomó el cuchillo para sacar la piel de los vegetales. Yo me sentí inútil ahí parado sin saber qué hacer.

Wonyoung levantó la cabeza y me regaló una sonrisa.

—Sunoo, ¿quieres por favor agregar el filete con los champiñones?

—Emh sí.

—Es importante que no se cosan demasiado, solo alrededor de cinco minutos y rebaja el volumen del fuego cuando llegue a tres. No olvides moverlos lentamente para que todo se funda.

—Está bien.

Tomé una cuchara de madera y con calma puse los filetes dentro de la mezcla. Nunca en la vida había preparado algo como eso, ¿por qué era necesario mezclar todo? Removí lentamente los filetes, mientras miraba a través de la pequeña ventana las luces de la ciudad. Solté un suspiro contenido de muchas cosas, entre ellas la desilusión de saber que entre Sunghoon y yo no sucedería nada.

Solo hay que verlo para entender eso, giré un poco, lo miré de reojo. La manera en la que Sunghoon le habla a Wonyoung, con esa dulzura que jamás tendrá conmigo. Solo hay que verlos para entender muchas cosas, como que están hechos el uno para el otro, ambos son perfectos, ambos encajan y se complementan. Ríen de los mismos chistes y completan las palabras del otro. Cualquiera que tenga dos dedos de frente se daría cuenta de que hay algo entre ellos que es mágico y hermoso. Un poeta podría inspirarse en un amor para hacer un soneto perfecto.