24.

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Los dolores de cabeza han incrementado en gran medida. Sé que tener que lidiar con la resaca de mierda forma parte de eso, pero incluso si a momentos me siento sobrio el dolor continúa picándome sin parar.

Se ha convertido en un problema y la única manera de lidiar con eso fue retomar los cigarrillos que solo me dejan un sabor amargo, como susurrándome que mi cuerpo está jodido. Cómo no estarlo, si la comida rápida me ha provocado más nauseas que la cosa podrida no identificada en el refrigerador.

—Voy —susurré tratando de aclarar mi garganta. Me sentí algo mareado al levantarme del sofá, no sabía exactamente cómo había llegado ahí, pero agradecía poder sostenerme de su textura para poder llegar hacia la puerta que no ha dejado de sonar como un martillo en mi cabeza.

Cuando abrí me encontré con los ojos de Wonyoung internados en una preocupación contagiosa.

—¿Dónde estabas metido? —Ella ingresó al departamento cuando yo me giré para cerrar la puerta y recargarme en ella para no resbalar.

—¿Buenos días?

—Buenas noches, ¿sabes qué hora es? —Wonyoung tomó mi rostro entre sus manos y me inspeccionó con ese ceño fruncido.— ¿Estás ebrio?

Son muchas preguntas a la vez. ¿Era noche? ¿Acaso había dormido todo el día? No recuerdo exactamente lo que sucedió ayer, estuve con Jack bebiendo algunas copas en la fiesta que organizó su primo y después todo simplemente se borró de mi mente. ¿Cómo llegué a casa? Oh no, joder, ¡la moto!

No... recuerdo que no llevé la moto, uf, mi bebé estaba a salvo.

—...

—¡Sunghoon!

—Cariño, no grites por favor.

Me abrí paso entre la puerta y su cuerpo para poder huir hacia el sofá, necesitaba sentarme antes de caer como un costal contra el piso.

—Estás ebrio...

—Quién sabe.

No quería sonar grosero, mucho menos quería iniciar una pelea con ella, solo quería un poco de silencio para poder descansar sin morir gracias al dolor de cabeza.

—Te llamé toda la noche... ¿al menos te importo?

—Me importas mucho. —Necesito un café muy cargado y como unas veinte pastillas.

—No parece. Te dije que teníamos una cena con mi padre, ayer te esperamos hasta las diez y tú estabas embriagándote.

Oh la cena, la olvidé por completo. Bueno, su padre me odiaba antes y lo hace ahora, las cosas no iban a cambiar por una cena.

—Lo siento...

—Pensé que haríamos que esto funcionara, pero tan pronto como iniciamos todo se está desvaneciendo, Sunghoon.

Lo sé, es frustrante porque no logro encontrar la chispa que nos unía. Tal vez hemos cambiado, pero los sentimientos siguen siendo los mismos y aún así no hay nada que pueda hacerme sentir tan vivo como...

—No me encuentro bien —en estos momentos.

—¿Cómo crees que me encuentro yo?

—Al menos no peor que yo, eso puedo asegurarlo.

—¿Te estás oyendo?

En serio no quiero hablar ahora, puedo decir cosas sin sentido que podrían herirla, aunque inevitablemente está comenzando a llorar de una manera que me hace sentir más culpable de lo que ya me siento.

—Lo siento.

—Es por él, ¿no? Te embriagaste por su culpa...

—No lo metas en esto por favor.

Sunoo, el chico flor ⪼ SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora