11.

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El sueño ha vuelto, la pesadilla ha regresado.

—Es tu culpa Sunoo, es tu culpa, ¿no es así? Querías venganza, por eso lo hiciste.

—¡No! Yo nunca haría algo así.

Yo nunca haría algo así, es solo un rumor que esparció Jungwon, ¿por qué nadie me cree? ¿Por qué todos me juzgan de esa manera? ¿Por qué nadie me cree?

—¡Maldito mentiroso, desaparece!

Cerré los ojos con fuerza y los volví a abrir, no estaba en el jardín de la universidad, levanté la cabeza para reconocer aquel sitio frío, me encontré con sus ojos rojos y su cabello despeinado. Él no podía sostenerse, pero sí mantenía esa mirada llena de odio.

Sentí el olor al tabaco... lo sentí...

—Espero que te mueras, Sunoo. —Susurró. Mi corazón comenzó a latir con prisa, no quería más dolor.

Me levanté de golpe con la respiración agitada. Sunghoon se giró a verme de inmediato.

—¿Estás bien? —Me preguntó con calma, yo tardé algunos segundos en procesar qué es lo que ocurría.

Se trataba de esa estúpida pesadilla otra vez, se trataba de ese recuerdo que quería borrar.

Sunghoon estaba sentado sobre la orilla de la cama, sin nada puesto encima y fumando un cigarrillo, mientras no veía nada en especial, solo la luz que ingresaba a través de la ventana.

—S-sí. —Me sentí muy aliviado de encontrarlo junto a mí y de despertar ahí, sobre su cama.

—Ya casi son l-

La puerta sonó de golpe ni siquiera usaban el timbre, alguien tocaba con los puños con mucha fuerza y rudeza. Sunghoon soltó un gruñido y se dirigió hacia la puerta. Yo me levanté con velocidad y le seguí, esos sonidos no eran normales, podían ser ladrones.

—Ten cuidado... —Sunghoon siempre ha sido el que protegió a mi madre, a su madre y a mí, así que podía confiar en él.

Abrió la puerta y dejó escapar un suspiro de cansancio. Oí un grito desde afuera.

—¡Hoonnnie!

—¿Qué haces aquí?

—¿P-preguntas eso? —Un chico se resbaló por la puerta y estuvo a punto de caer hacia el piso si no hubiera sido porque Sunghoon sostuvo su brazo y lo impidió. El chico estaba un poco ebrio.

—Jack, ya vete.

—Estaba preocupado por ti, bro. ¿Por qué... no viniste a la fiesta?

El chico se sostuvo del brazo de Sunghoon, mientras soltaba algunas risitas. Intentaba pararse y al final lo hizo, pero se tambaleaba peligrosamente.

—Jack...

El tal Jack ingresó al departamento con toda la confianza del mundo y se volteó a verme, giró graciosamente hasta dejarse caer sobre el sofá. Eso no impidió que su mirada siguiera posándose sobre mí.

—¿Quién es él?

—No te interesa, ve a dormir, sigues subido.

—¡No! —Gritó y movió sus manos exageradamente.— ¡No estoy subido!

Claro que lo estaba, pude percibir el olor de alcohol impregnado en su ropa y aliento. Los domingos se crearon para que la gente pueda descansar, y ese chico hacía justo lo contrario. Sunghoon se sentó a su lado y el chico agitó su mano, llamándome. Yo me quedé paralizado ahí, después de cerrar la puerta.

Sunoo, el chico flor ⪼ SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora