Yasei no Inu |FINALIZADA|

Capitulo 56: La liberación del demonio

MIU

-Masaru nació en un lugar distinto que el mío, cuando lo conocí el intento matarme pero tuve suerte- dijo Naoki mientras reía un poco, pero podía expresar en sus ojos tristeza.

-¿Qué le sucedió?- pregunte.

-Quisiera decírselos, pero no puedo, le prometí a Masaru que no lo haría- dijo Naoki.

-Esta bien, lo entendemos- dije.

-Gracias- dijo Naoki.

Voltee hacia Yasei y me di cuenta que estaba temblando y a la vez sudaba mucho, entonces puse mi mano en su frente y estaba muy caliente.

-Al parecer te está dando fiebre- dije.

-No seas tonta, esto no es fiebre, son los efectos que me pasan antes de transformarme- dijo Yasei.

Voltee hacia la ventana y ya era muy tarde, faltaba poco para que fuera de noche, entonces alguien abrió, era Masaru.

-Ya es hora- dijo Masaru.

Sabíamos de que hablaba. Entonces todos nos fuimos.

Llegamos a un parte muy alejada de la aldea. Entramos a un lugar que era como un calabozo, encerraron a Yasei en una celda y lo amarraron con cadenas.

-¿De dónde consiguieron todo esto?- pregunte.

Yo no pensé que en esta época fuera tan fácil tener cadenas.

-Las conseguimos en una aldea muy alejada de aquí, pero no fue nada fácil- dijo Naoki.

Yo me encontraba afuera de la celda, pero podía ver a Yasei, luego Masaru termino de encadenar a Yasei de los pies y las manos y salió de la celda.

-Es hora de irnos- dijo Masaru.

-Yo me quedaré aquí- dije.

-¡¿Qué?!- preguntó Masaru.

-Señorita Miu, ¿piensa quedarse aquí?- preguntó Naoki sorprendido.

-Si, me quiero quedar con Yasei- respondió.

-¡Acaso estas loca!- gritó Masaru.

-Si lo estoy, dime loca por solo quedarme aquí con mi mejor amigo y apoyarlo- respondí.

-Tsk, como quieras- dijo Masaru y se fue.

-¿Estás segura Miu?- preguntó Yasei preocupado.

-Claro que si, nunca te abandonaré- respondí.

-Bien, yo me voy, tengo cosas que hacer, nos vemos- dijo Naoki y se fue.

Me senté en frente de la celda.

-Por favor, no te asustes cuando me veas-dijo Yasei.

-No me asustaré, lo prometo- dije sonriéndole.

Nos quedamos callados en todos ese tiempo. Pero entonces la luna apareció.

-Miu- dijo Yasei.

-¿Si?- pregunte mientras lo observaba.

-Ya es hora, por favor, sólo conserva la calma- dijo Yasei.