Amor de Invierno (Vixx's Love Season Serie, #1)

24

Dieron las seis y ya Shin Hwa estaba frente a las puertas de la oficina esperando por mí. Me sorprendió verlo allí. Normalmente los chicos eran los que venían a asaltarme la oficina antes de que me fuera. Pero esta vez estaba el fotógrafo sin un rastro de Sun Hee. Apagué el ordenador, me quité el abrigo de Ravi, dejándolo en su lugar de siempre, cogiendo el mío para salir.

-¿Dónde está Sun Hee?- le pregunté cuándo me encontré con el hombre en el pasillo.

-Ella ya está en el restaurante. ¿Vamos?- caminamos por el pasillo, hablando y riendo plácidamente hasta llegar a las puertas de la compañía me detuve para ponerme el abrigo.

-Permíteme, ayudaré con eso.- Shin Hwa tomó el abrigo y lo sostuvo para que yo me lo pusiera cómodamente.

-Gracias

-¿Ha Neul? -miré en dirección a donde me habían llamado para encontrarme con los chicos. Ellos sonrieron al verme, pero pude percatarme que Ravi había entrecerrado los ojos en dirección al fotógrafo. Fue algo que no estaba segura de interpretar bien. ¿Shin Hwa no le caía bien a Ravi? Negué con la cabeza. Eso no hacía ninguna lógica. Todos saludaron al fotógrafo antes de dirigirse a mí.

-¿A dónde vas?- N se veía cansado. Había estado practicando todo el día.

-Iré a cenar con Shin Hwa y Sun Hee. ¿Quieren acompañarnos?

-Nos encantaría, pero no podemos.- se lamentó Hyuk. Y me lo esperaba, pero los invité por pura cortesía.

-Tal vez en otro momento- dijo Leo quien nos miraba con curiosidad a Shin Hwa y a mí.

-Claro -el fotógrafo habló.-, espero que puedan hacerlo.

-¿Los planes de esta noche siguen en pie?- Ken me preguntó, pero su energía de siempre estaba controlada. ¿Era porque alrededor del fotógrafo era solo trabajo? Puede ser, a pesar de todo ellos eran muy propios cuando tenía que ver su trabajo.

-Obviamente. Estaré allí para hacerte llorar.- Hongbin se rio.

-Eso no es muy difícil, él realmente se frustra rápido.

-No los retenemos más.- N interrumpió la pequeña guerra que iba a ver a continuación. Ken ya estaba listo para hablar y yo para replicar. Oculté una risa detrás de mi mano.

-Tengan buenas noches- se despidió el fotógrafo.

-No se olviden de comer algo- les dije-. Buenas noches.- hice una leve reverencia y ellos me la devolvieron con un coro de buenas noches.

-Come muchas cosas sabrosas.- dijo Hyuk.

-No te olvides del juego.- dijo Ken, para entonces el fotógrafo ya abría la puerta para mí.

Al llegar al auto, Shin Hwa me abrió la puerta. Le sonreí para ocultar la confusión, pues no estaba acostumbrada a tales gestos.

-Al parecer el grupo se lleva muy bien contigo.- encendió el auto cuando entro y lo puso en marcha.

-Me tratan muy bien, no me quejo de ninguno de ellos.

-Es muy bueno, no esperaba menos, ellos son excelentes personas.- él no tenía que decirlo, eso ya lo sabía.

Conversamos de todo un poco de camino al restaurante. Hablar con él era sumamente sencillo, me sentía cómoda. Nos encontramos con Sun Hee, quien nos esperaba en la mesa de un restaurante acogedor, pero de esos que ves a leguas que vas a dejar un órgano de tu cuerpo para poder pagar.

-Él escogió el lugar- Sun Hee se encogió de hombros.-. Es su restaurante favorito. Nunca puedo hacerle cambiar de opinión cuando este restaurante ya ha sido escogido.- le sonreí a Sun Hee porque tenía una cara de contrariada.

-Es sumamente agradable.

-La comida es mejor. Espera a probarla.- me sonrió.

-¡Podemos pedir lo que sea, Ha Neul! Así que no dejes que te intimide

-Dios sabe que Sun Hee come por un batallón, así que ya nada me sorprende.

-¡Oye! Yo no como mucho.

-No, comes demasiado.- antes de que Sun Hee pudiera replicar, llego una mesera, preguntando que queríamos de beber.

-Una botella de vino- pidió Chin Hwa, pero de pronto se detuvo.-, ¿quieres algo diferente?-negué con la cabeza

-Vino es perfecto.

Nos envolvimos hablando y era la primera vez que pasaba un tiempo agradable, sin que mis chicos estén involucrados. Se puede decir que es mi primer momento de vida normal desde que llegué aquí. Tal como predijo Shin Hwa la comida estuvo exquisita, Sun Hee sí comía mucho, y el vino estuvo de muerte.

-¿Le mostraste las fotos que le tomaste aquella vez?- Sun Hee estaba atacando su plato de carne.

-No, se las muestro más tarde.

-Tiene una proposición para ti Ha Neul, espero que la tomes. Has vuelto loco a mucha gente. Acuérdate de mí cuando seas famosa.

-¿De qué hablas? ¡Alguien que me ilumine por favor!- el fotógrafo le dedicó a mirada de pocos amigos.

-Mostré tus fotos a unas personas que buscaban innovar su campaña. Me pidieron que te contactara.- respiré profundamente.

-Gracias por la oferta, pero no.- tenía serios problemas cuando involucraba ser el centro de atención. Francamente tampoco es algo que quisiera hablar con ellos... pero todo lo que implicaba que me viera mucha gente, terminaba descartado. Sun Hee rio por lo bajo.

-Esto será divertido de ver. Él no te va a dejar en paz hasta que logre tomarte las fotos.- me reí de ellos.

-Le tomará mucho tiempo para que solo yo le diga que lo pensaré.- me encogí de hombros y Shin Hwa rio con ganas

-Esto será divertido de ver.- finalizó Sun Hee.

Finalizamos la cena y nos quedamos conversando un rato más. Ya eran un poco más de las ocho cuando Shin Hwa me llevó hasta el apartamento. Esta vez lo hicimos en silencio. Él se veía pensativo y yo de pronto me encontré preguntándome sobre qué hacía Ravi en este momento, y lo que podría significar su comportamiento de hoy. Él realmente no me había dirigido la palabra, además de las de cortesía. Más no creía que estuviera molesto. Eso me dejaba a la derriba.

-Ya estamos aquí.- dijo sacándome de mis pensamientos. Le había dado la dirección y él solo había llegado, me costará mucho aprenderme este lugar.

-Gracias por la invitación y por traerme. La pasé estupendamente.- él sonrió.

-Espero que se repita. Tal vez deberíamos ir por un café la próxima semana. Sun Hee tiene que entregarme unas cosas por lo que estaré cerca.

-Eso suena bien.

-Ah, por cierto- me tendió un sobre.-. Son tus fotos.

-Oh, ¡gracias!- tome el sobre, esperando a que el presionará sobre el tema de las fotos. Pero no lo hizo, por lo que me sentí aliviada.- Entonces nos vemos otro día. Buenas noches.

-Descansa. Buenas noches.- me bajé del auto, mirando el reloj. Seguramente ya Ken estaba conectado.

Llegué al apartamento y abrí la puerta, dirigiéndome directamente al ordenador. Lo encendí y fui a cambiarme por algo cómodo antes de sentarme y ponerme el headsets para conectarme.

-Aquí estoy.- al escuchar mi voz Ken comenzó a celebrar.

-¡¡¡Bien!!!

-Espera, déjame preparar el equipo- preparé las armas y todo lo demás.-. Ok, ¡ya estoy!

Las horas pasaron y nosotros seguíamos jugando. Tiempo después se nos unió Hongbin. Fue un tiempo súper divertido, donde ellos se rieron mucho porque yo maldecía en varios idiomas y ellos no podían entender, pero por mi tono sospechaban lo que decía. Esta demás decir que nos fuimos a dormir bien tarde, pero la pasamos tan bien que me dormí con una sonrisa en los labios.