Amor de Invierno (Vixx's Love Season Serie, #1)

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La promoción de ese nuevo álbum encontró su fin a finales de mes, con dos premios en sus manos. Estaba tan feliz por eso que casi rayaba la euforia, además su felicidad cuando recibieron los premios fue tanta que me alegraba estar allí presenciando el momento. Era de tarde cuando llegamos a la compañía, no tenía ningún trabajo pendiente que no pudiera hacer desde casa, por lo que decidí marcharme. Después de todo podía hacerlo si los chicos no me necesitaban, cuando me iba o no a mi casa dependía enteramente de ellos y Vixx estaba hablando de querer irse y tirarse a descansar. No los culpaba.

Antes de marcharme me despedí de ellos y me apresuré a salir. Tenía una columna que escribir y fotos que subir. Esperaba poder hacer la columna en dos idiomas, pero que otras personas se encargaran del resto. Estaba lo suficientemente cansada para esta vez no querer hacer nada. Miré el cielo al salir, las nubes eran tan negras que sabía que pronto llovería. Por lo que a estas alturas haría más frío para mí, aunque el clima evidentemente estaba fresco. Ugh, extrañaba el clima tropical. ¿Quién diría que extrañaría el calor que casi me hacía derretir?

-Todavía no te has ido, es un alivio -Arqueé una ceja cuando escuché a Ravi a mi espalda.

-¿Sucede algo?

-No. Solo voy a acompañarte a tu casa -Me dedicó esa sonrisa tan suya. Poniéndose la capucha de su abrigo impermeable encima de su beannie.

-No es necesario y es posible que la lluvia caiga de camino.

-Iré contigo. El manager piensa que iré al estudio -Reí, esa era su excusa la mayor parte del tiempo.

-Debes amar tu estudio, pasas mucho tiempo ahí -Él se unió a mis risas.

-Eso fue exactamente lo mismo que me dijo.

-Lloverá -Le advertí en el último intento por hacerle recapacitar.

-¿Tienes una licenciatura en meteorología que no me hayas dicho?

-No, solo es obvio.

-No trates de poner excusas para que me quede, Boo. Eso no pasara.

La lluvia nos tomó de camino al apartamento, tal como predije. Las gotas comenzaron a caer cada vez más constantes y frías pero eso no me hizo perder el ánimo para nada. Muy pronto el cielo parecía roto, dejando caer una buena cantidad de agua. Él corrió a refugiarse en el primer tejado que encontró y yo solo me quedé, enfrentando la lluvia. Iba a lamentarlo luego, pero sería una pena no disfrutarla.

-Ven a refugiarte -Su tono serio me hizo notar que pensaba que estaba loca. Eso me hizo preguntarme: ¿cómo a estas alturas no se ha dado cuenta de eso?

-No eres de papel, ¿o sí?

-No, no lo soy. Pero está muy frío como para humanamente soportarlo -Al comienzo sí, pero luego terminabas acostumbrándote. El problema comenzaría cuando saliera de la lluvia.

- ¿Vienes a bailar conmigo?

-¿En la lluvia? -Negó con la cabeza-. No -Reí. Casi pensaba que haría cualquier cosa por mí.

-¿Por favor? Vamos, tu abrigo no se mojara -Al contrario del mío, ya parecía un perro abandonado en la lluvia. Ravi se veía como si fuera a volver a decirme que no, pero soltó un sonoro respiro y salió del tejado.

Adoré este momento de locura más que cualquier otro en mi vida. Bailamos aún ritmo lento debajo de la lluvia. Con sus manos en mi cintura y mi cabeza recostada en su pecho, no tenía ninguna preocupación. La lluvia caía salvaje por lo que la gente nos pasaba por el lado deprisa, sin fijarse en nosotros dos.