One-Shots

Jhiker

No lo hagas

Jhak esta una vez más ahí, frente a la cornisa de un edificio sintiendo el aire en su rostro, tenia los ojos cerrados, sabia que si los abría posiblemente se acojonaria antes de lanzarse... Sí, estaba a punto de suicidarse y tal vez se pregunten; ¿Por que?

La respuesta sería, ¿por que no hacerlo? Estaba cansado de la gente, de la vida, de que todos le dijeran lo que tenia que hacer, que todos lo creyeran un niñato malcriado que alcanzó la fama con dinero, que se acercarán a él por conveniencia y por último, estaba cansado de estar sólo, que nadie le quisiera, le mostrará afectó, que todos lo dejaran sólo... Suspiró y comenzó a balancearse levemente como si intentara que pareciera un accidente.

—¡Ey!, ¡Tu!, ¡Baja de ahí!—Le habló alguien a sus espaldas, un chico, a juzgar por su voz.

—Vete —Respondió secamente, sin verlo.

—No me iré, si lo hago saltarás y morirás... No quiero eso —Dijo acercándose un poco. Jhak soltó una risa sarcástica.

—No le importó a nadie, y menos a un desconocido, ¿quieres dejar de fingir? —Dijo balanceándose hacia adelante.

—Por favor, piensalo un poco, seguro hay alguien que te necesita aquí, un familiar, un amigo, una pareja...

—No hay nadie —Interrumpió Jhak.

—Entonces dejame cambiarlo —Lo tomo de la muñeca y lo jalo con él provocando que los dos calleran al suelo.

—Debiste dejarme morir —Susurro Jhak al chico.

—Nunca dejaría morir a alguien... —Respondio dulcemente, se levantaron —Me llamo Iker, ¿y tu?—Preguntó mirando al depresivo chico que acababa de salvar.

—Soy Jhak —Respondio simplemente.

[...]

Media noche iba a dar y ahora estaba en un puente sentado con los pies colgando se recargo en su brazos y cuando iba a ejercer fuerza para tirarse un brazo le tomo por la cintura halándolo en un abrazo.

—Esto te es una costumbre, ¿no es así? —Reconoció esa voz al instante.

—Tal vez, interrumpir la muerte de las personas es la tuya, ¿no es así? —Pregunto separándose de él.

—Tal vez —Imito su respuesta.

—¿Vas a soltarme?—Pregunto Jhak.

—Solo si me das algo a cambió —Sonrio amable.

—¿Cuanto quieres?—Pregunto en tono indiferente.

—Solo quiero tu número de móvil —Rió levemente el chico.

—Vale —Respondió Jack un poco extrañado.

Le dio su móvil y después lo soltó, Jhak comenzó a caminar cerca de la barandilla en la que estaba sentado alejándose de a poco de Iker.

[...]

Iker

Jhak, ¿te gustaría ir al cine hoy?