One-Shots

Zarter

Sin título

—Ahh...—Gimio Miguel un poco alto, Pedro se inclinó y cubrió la boca del mayor.

—Shh... N-no tan fuerte, cielo—Le susurró al oído mientras seguía embistiéndolo.

Los gemidos de Miguel eran abogados por la mano del menor, después de unos minutos Pedro recargo su cabeza en la espalda de Miguel y ahogo un gemido sonoro apretando su mano en la boca de Miguel... Después de unos minutos estaban poniéndose nuevamente la ropa, Miguel cambió las sabanas de la cama para no dejar evidencia de nada y antes de salir Pedro lo tomo de la cintura.

—Te amo —Le dijo antes de besarlo.

—Yo también te amo—Respondio Miguel al finalizar el beso.

Ambos salieron de puntillas pata no hacer mucho ruido y entraron en sus respectivas habitaciones. Miguel, por su parte entró y se acostó abrazando a su pareja, mientras que Pedro solo se recostó pensando.

[...]

A la mañana siguiente todo fue normal, los primeros en estar en pie fueron los dos primos encontrándose en la cocina.

—Buenos días, ¿dormiste bien?—Le pregunto Pedro sonriéndo pícaramente.

—Claro, dormí excelente, ¿y tu?—Le respondió Miguel en el mismo tono pícaro.

—Me faltó más tiempo contigo, en realidad... —Pedro lo tomo de la cintura y lo pego a él.

—Mhg... S-sabes que ahora no se puede, Juan y Jose van a despertarse en cualquier momento —Se negó Miguel dándose la vuelta y alejando un poco a Pedro.

—Ya, pero Migue... No importa, si nos ven mejor, así puedo estar contigo para siempre —Pedro lo tomo de la cintura y se acercó para besarlo.

—Pedro, esto esta mal —Miguel dijo esto pero de igual forma se dejo besar.

—¿El que?, ¿Engañar a Juan y Jose o que seamos primos?—Le pregunto ya que era lo que Miguel siempre decía para “terminar” con eso.

—Ambas, Pedro... O sea, tal vez para ti no este mal que seamos primos, para mi tampoco, pero, esta mal... Y sobre Jose y Juan, no merecen esto, ninguno de los dos lo merece... Deberíamos dejarlo, por el bien de todos —Dijo Miguel separándose se Pedro y bajando la mirada.

—Si es lo que quieres, dejarlo, adelante... Deja a Juan y quedate conmigo, yo dejare a Jose en cuanto tu me digas y lo sabes —Le dijo Pedro, buscando la mirada de Miguel.

—No puedo dañar a Juan, así no, él me ama mucho y...

—Yo también te amo y parece que eso no cuenta —Interrumpió celoso de que se refiriera así a Juan, como si lo quisiese en realidad.

—Si cuenta... —Dijo Miguel levantando un poco su mirada.

—Actúas como si no —Respondió serio mirando a Miguel.

—Solo quiero tiempo, ¿vale?—Le dijo serió.

La puerta de la cocina se abrió dejando ver a Juan y Jose riéndose entre ellos.