Sin título
El moreno se acercó despacio hasta el chico que cocinaba y se abrazó firmemente a su cintura, poniendo su rostro en la curvatura de su cuello.
—Juan, necesitó comer primero, ¿si? —Miguel miro al chico y este asintió.
—Lo sé, solo que me gusta abrazarte... —Miguel sonrió y no pudo evitar dejar de poner atención a la cocina para girarse de frente a Juan.
Se acercó a sus labios despacio y lo beso con detenimiento, con todo el amor de su ser.
—Se quema tu comida —Susurró Juan separándose un poco del beso.
—No importa —Miguel volvió a unir sus labios y se quedaron así unos minutos más.
Después de que Miguel comiera su desayuno, como todos los días, se sacó la camiseta y se acercó a Juan, el moreno sonrió y acercó su mano al hombro de Miguel, acariciándolo.
—Ahora mismo se me antoja algo más que solo morderte un poco...
—Más tarde, tengo trabajo hoy. Lo sabes —El moreno hizo un puchero.
—¿Me vas a compensar?
—Lo pensaré, ahora hazlo.
Juan bajo su cabeza hasta el hombro de Miguel, buscando un sitio que aún no hubiera mordido. Encajo sus colmillos y Miguel sintió el leve e incomodo dolor inicial de siempre, no importaba si Juan lo mordía diez veces al día él iba a seguir teniendo esa sensación, poco a poco se relajó.
Juan bebía su sangre solo tres veces al día, a veces cuatro pero no le gustaba hacerlo por que sabia que si se excedía Miguel podía morir... Pero igualmente no podía alimentarse de nadie más puesto a que habían creado un vínculo sin querer, la primera vez que Juan mordió a Miguel quedo marcado y eso le hacía solo poder alimentarse de él hasta que Miguel muriera.
Cuando Juan se separó limpió la sangre de Miguel de sus labios con el dorso de su mano y cuando lo soltó se dio cuenta que el chico se tambaleó un poco, lo alcanzó a sostener.
—Ey, ¿qué pasa?, ¿tome demasiada?, ¿quieres que cancele lo que tienes que hacer hoy?, ¿te sientes mal? —Juan se veía preocupado, no quería que le pasara nada a su amado.
—Juan, calma, no es tú culpa... Solo fue un mareó, es algo normal.
—¿Normal? Miguel, ¿desde cuando es normal marearse de la nada? Fue mi culpa.
Miguel tomó el rostro de Juan y lo hizo mirarlo a los ojos.
—No fue tu culpa, ¿vale? Últimamente me mareó de la nada, es por el calor, toda mi vida me ha pasado eso. Así que no te culpes por esto.
El moreno no le creía, le dijera lo que le dijera Miguel, él sabía que había sido su culpa, que tomo demasiada sangre y por eso se había mareado. Pero asintió, para que Miguel dejará de mentir en su cara de esa forma.
[...]
—¿Alguien como yo puede convertirse en un vampiro?
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One-Shots
FanfictionCompilación de One-Shot's variada en torno a pedidos de lectores. •Pueden hacer sus pedidos en comentarios o por privado. #Nueva portada realizada por mi buena amiga cuyo seudonimo es Lady Bolton ~Okumura