Zarcronno

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Sin titulo

Juan entro al instituto e inmediatamente todas las miradas fueron a él, le pareció tan raro ya que el era la persona menos popular de todas ahí, miro detrás para ver si venia alguien importante detrás, pero no. Solo estaba él parado ahí, bajo la cabeza y avanzo con vergüenza, todos murmuraban cosas a la par que lo veían pero el no se enteraba de nada...

—¿Segura que es él? —Preguntó una chica que estaba ahí a su amiga, apuntando a Juan.

—No le apuntes, no seas obvia... Y sí, estoy segura, dijeron que era él...—Dijo la otra dándole un manotazo a su amiga.

Juan paso de preguntar que se traían con él y llego a su clase, todos le miraron al entrar e inclusive algunos se rieron, pero vamos, eso de reírse era algo que hacían siempre, así que no sabia si era de él o de cualquier otra cosa... Se dirigió a su lugar, tercera fila en tercer asiento, como siempre... Saco una libreta y comenzó a escribir.

[...]

Todos salieron corriendo de clase y Juan fue el último, nuevamente al salir al pasillo le miraron.

—A mi me parece que es un gesto lindo, hasta es romántico...—Dijo una chica mirando de reojo a Juan —Tu deberías hacer algo así...—Le dijo a su novio.

—Por favor, no es romántico, es una mariconada...—Dijo el chico mirando mal a Juan.

El chico solo bajo la mirada y siguió caminando hasta que un grupo de chicos se le acerco empujándolo levemente.

—Vaya, pero si es nuestro chico enamorado, ¿eh? —Uno de los chicos que estaba al lado le empujo la cabeza levemente.

—N-no se de que hablan...—Dijo Juan alzando su cabeza un poco.

—¿Que no sabes?—Rió otro de los chicos —“Andando solo sin destino sin saber porque camino, pero llegaste tú y todo empezó a cobrar sentido...” ¿no te suena, Juanito?—Lo primero lo “canto” en burla intentando igualar el tono de Juan.

—Me parece que no.... ¿Y si recuerdas esta parte: “Quise acercarme desde luego, pero ¿quien le hablara a un zombie que está solo y que da miedo?” la recuerdas?—Rió el otro.

Juan abrió los ojos como platos al reconocer esa letra... Era una parte de una canción de amor, que él escribió y rapeo para alguien... Pero se suponía que nadie sabia de la existencia de esa canción, a excepción de una persona...

—En realidad, tienes mucha razón en esa canción, ¿a quien le gustaría estar con alguien como tu? Después de todo, tu mismo te comparas con un Zombie, un bicho raro y asqueroso... Tal y como lo que eres, marica —Le empujo uno.

Juan no se defendió, no podía, era demasiado pacífico y esos eran tres tipos de dos o un grados arriba de él, más altos y fuertes... Le estaban pegando y él no hacia nada mas que dejarse.

—¡Ey!, ¡Tios ya vasta!, ¡Dejenlo ya! —Llego otro empujándolos a todos.

Dejo a Juan atrás y a los otros de frente a él, mirándolos serio.

—¿Aún lo defiendes? Vamos Miguel, es un puto marica, se metió contigo y ¿aún así lo defiendes?—Le dijo uno acercándose peligrosamente a Miguel.

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