Necroromancer Online

Chapter 9

¿Cómo podía ser posible?

En tan poco tiempo, el pueblo entero de Grenti había sido exterminado por esa extraña bestia que con sus largos, desubicados y numerosos dientes absorvía la sangre de sus víctimas poniendo las cabezas enteras de ellos dentro de su amplia boca que se estiraba de manera anormal. Por un momento pensó que decapitaría al viejo de la posada cuyos gritos se ahogaban en el interior de la criatura que lo mantenía fuertemente agarrado con sus enormes manos que poseían unas uñas largas y afiladas.

Su fuerza era descomunal para una persona normal y en menos de un minuto, el vampiro había sacado por completo toda la sangre del cuerpo del viejo que al caer completamente seco, apenas podía estremecerse.

Los dejaba vivos, Artorias de inmediato se dio cuenta al ver que los demás cuerpos también temblaban levemente. Pero de todos modos, morirían...de una forma prolongada y dolorosa. Artorias no podía hacer nada y su collar en ese momento estaba el doble de cálido que cuando enfrentó al Liche hechicero.

- ¡ahhh!...

Meguri al ver a su tío siendo asesinado de una forma muy cruel, dejó escapar un grito cargado de una mezcla de sentimentos negativos. Casi lloraba mientras se tapaba la boca y nariz al no soportar la escena ni el fuerte olor que había en el ambiente.

El sentimiento de dolor al ver perder a alguien... Artorias la entendía, pero se mostraba inmutable a pesar de todo.

- deberías irte...

Meguri lo ignoraba, parecía que no lo escuchaba. No se lo iba a a repetir, así que la dejó con su sufrimiento mientras volvía a desenfundar su katana.

A diferencia del Liche, esta vez Artorias tenía cierta ventaja, o eso esperaba, ya que en parte, había una franja en la hoja de su katana que estaba hecha de plata, además de que el filo mismo tenía fragmentos de ella.

Por alguna razón, los vampiros eran demasiado vulnerables a este metal y él no desaprovecharía esta oportunidad.

Cuando el vampiro se percató de él, sus ojos carmesí brillaron...había maldad en sus ojos.

¡Woooahhh!

Dejando escapar un rugido ensordecedor, a cuatro patas se precipitó y atacó a Artorias con sus zarpas, pero este se movió a un lado rápidamente, al mismo tiempo que logró rozar su katana en el abdomen del animal provocando una herida que disparó mucha sangre al abrirse.

El vampiro da un rugido de dolor y a pesar de estar a tan sólo centímetros de Meguri que sintió un miedo que la paralizó, simplemente la ignoró centrando su atención hacia Artorias que estaba completamente estupefacto.

"¿Qué? ¿cómo es posible? ¿no le hizo nada?"

Era cierto que éste vampiro se había hecho más fuerte al absorver demasiada sangre, la fuerza reunida de casi doscientas personas... Artorias pensaba que en verdad era un vampiro muy débil, sin embargo, la gran abertura de la herida poco a poco se fue cerrando hasta que parecía como si todo hubiera sido una ilusión.

La regeneración vampírica.

Esto no le causó asombro al joven guerrero que se encontraba más conmocionado al saber que la plata no le hacía daño como se cree.

¿O acaso serán invenciones populares?

Los vampiros en el mundo existían, pero casi siempre nunca se dejaban ver por estos lugares. Habían muchos tipos, algunos eran seres racionales y otros... Artorias estaba ante uno.

No podía saber de dónde salió, ni tampoco tenía tiempo para pensarlo, simplemente arremetió una vez más. Con sólo cortarle la cabeza bastaba y no dejarse tocar. La herida anterior comenzaba a dolerle por los movimientos bruscos y el vampiro mostraba una rabia espeluznante al no poder tocarlo. Él era muy lento...no, Artorias era mucho más rápido.