Necroromancer Online

Chapter 169

Luego de varios minutos...

- ¿Por qué me dice esto a mí?- le pregunta Reika con desconcierto a la maestra Erika que no parecía haber ninguna clase de broma en alguna de sus anteriores palabras- No creo que tenga nada que ver esto conmigo.

- Precisamente por eso.

- ¿Qué?

- Desde hace no mucho hay mucha inestabilidad en el mundo de las deidades, es cuestión de tiempo para que todo se desmorone...y Viralia fue la primera en caer, yo podría ser la siguiente, seguramente ellos ya saben que ella y yo ahora somos amigas, Araki querrá eliminarme también y para eso necesito que alguien lo sea por mí...ser mi sucesora.

- N-No entiendo nada- le reiteraba Reika que estaba demasiado conmocionada que le costaba asimilarlo y Erika entendió lo que ella sentía perfectamente.

- No creas que lo he decidido en este momento al azar, para empezar...esa espada que llevas contigo...originalmente era mía.

- ¿Qué? ¿Esto era...con razón...

Reika recordaba la vez en que Erika le pidió prestada Senabaki a Reika y la espada no opuso resistencia alguna, algo que jamás había ocurrido con nadie antes. Luego la utilizaría para una de sus tantas pruebas extremas y después se la regresó.

- Como seguramente te habrás dado cuenta, la espada tiene voluntad propia y no acepta que cualquier persona la use o de lo contrario se pondrá muy pesada. Sena todavía me hace caso un poco.

- ¿Un poco? ¿Por qué?

- Está resentida conmigo, la perdí en un duelo con Isbel y ella se apoderó de Sena, pero ahora de alguna manera fue a parar a tus manos. Curioso ¿No? De todos modos ahora está mejor que con esa mujer insoportable. Pero aún ni siquiera sabes utilizar una décima parte de su verdadero potencial y aunque es posible que tú utilices aunque sea una cuarta parte, acabarás muy mal. La super fuerza del universo que mantiene las cosas en su lugar...densidad y volumen...gravedad. Si no tienes cuidado podría engullirte. No es algo que una niña de once años debería de usar, pero es lo que hay. La responsabilidad de usar este gran poder está en ti y por eso te he elegido. Tienes mucho potencial, al igual que tu otro yo del mundo del que viene tu amigo.

- ¿Mi yo del mundo de Dio?

- Es muy desafortunado que él se metiera en mis planes de traer a esa Reika aquí, peor para él, estar en este mundo para ese chico es como estar en la misma boca del lobo...de todos modos como él hay demasiados con su mismo potencial, lo he visto pasar cientos de veces, en cambio tú, Reika, de ti es como encontrar una aguja en el universo, si eres capaz de manejar a Sena, entonces puedes hacer cualquier cosa. Pero claro, necesitarás mucho tiempo.

- E-Erika sensei- le dice Reika que parecía encontrarse mareada con tanta información obtenida de golpe- por si no lo sabía, yo solamente soy una humana y sin Sena prácticamente soy muy débil.

- ¡Hahahaha! Ni tú misma te crees esa mentira- se burló Erika- sabes muy bien que tu madre te entrenó desde pequeña, incluso mejoró tu condición física experimentando contigo, además de que gracias a que creciste en un ambiente salvaje, desarrollaste un olfato más agudo que ningún humano y tienes buenos oídos. Tu cuerpo puede soportar Ki y Chakra de forma simultánea, lo has demostrado muchas veces y no es algo que ni siquiera un adulto haría. Tienes un don inhato...la habilidad especial es lo de menos. Seguramente la habrías tenido si hubieras nacido en una familia usuaria de Chakra, es una pena.

- Pero...aún no entiendo por qué me dices todo esto ¿Acaso los dioses no tienen que arreglar sus propios asuntos?

Erika suspira profundamente y alza su mirada al cielo, que estaba despejado en esa parte de la selva.