Unos días atrás...
- ...Es tal y como lo habíamos contruído- suspiró Dio al ver finalmente, delante de sus ojos la enorme, imponente y majestuosa estructura que daba la entrada a la mazmorra con un sin fin de trampas, enemigos y jefes esperando en las entrañas de ese lugar al que ningún humano podría salir vivo incluso si estuviera en el primer piso...y eso se debía a una sola razón...
- ¿Así que mi otra yo pudo construír eso contigo? Cada vez me caigo más bien- comentó Reika que intentaba ocultar lo abrumada que estaba al saber que su otro yo pudo haber construído semejante estructura. Reika durante el camino se enteró por parte de su amigo de la existencia de una persona que sería exactamente ella, pero siete años mayor.
La curiosidad infantil de ella entonces la obligó a hacerle demasiadas preguntas que Dio le respondió aunque se sintió fastidiado a la larga.
En realidad la pequeña Reika en cierta manera era mejor que la del otro mundo por el simple hecho de saber mucha más cosas, pero aún así ella no dejó de sentir una profunda admiración por la amiga que su mejor amigo conocía desde que eran niños, tal vez por esa misma razón ella siente mucho afecto por él a pesar de estar consciente de que Dio había estado cometiendo muchos actos que de ser otra persona, Reika no se lo dejaría pasar.
- Pero ¿no creen que está muy descuidada?- comentó Rinoa que se le miraba incómoda por las enredaderas y raíces que invadía el mausoleo.
- A mí me parece muy estético, me gustan las cosas que parecen antiguas- dijo Lisboa que miraba solemnemente la edificación.
- Yo prefereriría que se viera como nueva- replicó Rinley que se comía lentamente una porción de una tarta de chocolate. Por supuesto, Nino estaba detrás de ella mientras que con su larga y pegajosa lengua se comía de mala gana los mosquitos que rondaban el lugar...
"¿Cómo sería una paja con esa lengua?"
Dio se preguntó eso cada vez que la veía comer de esa manera...¿por qué estaba pensando en eso en primer lugar? Nomás hacía falta ver esa dentadura como para que incluso al más enfermo ni siquiera se le ocurriera poner su cosa ahí adentro o de lo contrario...no hacía falta mencionarlo, después de todo él sabía que la boca de Nino era peor que una licuadora, al igual que ese enorme agujero que tiene en lo que vendría siendo su entrepierna que envés de una vagina tenía literalmente otra boca varias veces más grande y peligrosa que de ves en cuando se le daba por abrirse al igual que sus múltiples ojos los cuales tenía esparcidos por casi todo su cuerpo y tentáculos que sobresalían por debajo de lo que simulaba una larga falda con la que se arrastraba...ella no tiene pies por cierto.
Aún si Nino era un monstruo...con sólo tener una apariencia cercanamente femenina ya había llamado mucho la atención del chico que comenzaba a tener problemas existenciales.
"¿Acaso me estaré volviendo como Artorias?"
Si parece mujer y tiene tetas y agujeros, lo demás ¿qué importa?
Esa era la filosofía de ése rey pelirrojo pervertido...a estas alturas quién sabe a cuántas concubinas habrá acogido en el palacio.
- ¿Cuántos pisos tiene Dio-sama?- le pregunta curioso Neon que se paseaba su mano por su barbilla.
- Hasta donde sé, creo que sólo tiene once pisos, recuerden que yo sólo construí un treinta por ciento de la dungeon, así que...
Durante el viaje, los sirvientes ahora entendían más del por qué Dio quería que trataran a la pequeña Reika como si fuera él (aunque Dio ni siquiera tenía planeado que lo creyeran así). Básicamente era como su segunda ama, la gobernante absoluta de la dungeon por tener por así decirlo, la mayoría de las "acciones" de este patrimonio...incluso su estatua de tamaño natural estaba a simple vista y Reika por primera vez pudo verse en el futuro, aunque en parte se decepcionó al saber que no cambiaría nada a excepción de su estatura.
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Necroromancer Online
Fantasy¿Te imaginas a un tipo gordo otaku convirtiéndose en un ser Supremo? Sí, así es...increíble ¿no? Pues esta es la historia de Dio, un joven de preparatoria que a pesar de ser un tipo obeso posee una especie de suerte para conseguir hermosas amigas. N...