Avengers OneShots

Siempre volvemos (Clint Barton)

Prólogo: Clint y tu les prometen a sus hijas que volverán después de una misión, pero no todo sale bien.

Advertencia: Final triste.
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Tú esposo Clint y tu se encontraban juntos disfrutando de un día en familia junto a sus gemelas de seis años en la granja donde vivían, apartados de todo y de todos en el campo, cuando una llamada de Fury que los necesitaba para una misión interrumpió su día.

–¿De verdad tienen que ir?–Te preguntó tu hija pequeña Natasha, abrazando su oso de peluche, viendo como subías un bolso para cada uno a la nave que Fury les proporcionaba siempre para viajar desde SHIELD a su casa y viceversa.

Te agchaste un poco para quedar a su altura fuera de la nave, ofreciéndole una pequeña sonrisa y acomodando su cabello tras su oreja.

–Así es pequeña. Sé que tu papá y yo prometimos que nos quedaríamos con ustedes el fin de semana, pero ya sabes como es nuestro jefe. Tenemos que ir aunque no queramos.–Le dijiste con voz dulce.

Clint se acercó a ustedes con su otra hija Petra en sus brazos, y tú mamá siguiéndole por detrás con una sonrisa triste.

–¿Van a volver verdad?–Les preguntó Petra, una vez que Clint la dejó en el suelo, también agachándose para quedar a la altura de sus hijas.

–Pues claro que sí mis pequeñas.–Les aseguró tú esposo con una sonrisa.

–Siempre lo hacemos, siempre volvemos. No tienen de qué preocuparse.–Les dijiste antes de abrazarlas, Clint uniéndose a ustedes.

–No hagan travesuras y sean buenas con su abuela.–Les dijo poniéndose de pie junto a ti.

Te acercaste a tu mamá para darle un abrazo y despedirte de ella antes de irte.

–Gracias mamá por cuidar de ellas.–Le susurraste al oído.

–No tienes por qué, querida. Sólo cuídense y protéjanse mutuamente.–Les dijo a ambos.

–No se preocupe que todo va a salir bien.–Le respondió Clint, también dándole un abrazo.

Ambos se subieron a la nave, encendiéndola y comenzando a volar en el aire. Antes de partir, se despidieron de sus hijas y tu mamá, haciendo seña con sus manos desde la cabina donde se conducía, para luego pilotar la nave hasta la base de SHIELD.

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La misión se estaba poniendo complicada. Sobre todo porque mientras escapaban de la base de donde debían de robar información, te dispararon en el estómago, provocando que cayeras al suelo.

Clint corrió a tu lado, tomándote en sus brazos para escapar a un lugar más apartado. Una vez allí sabiendo que era seguro, llamó a Nat para que los fuera a recoger, mientras hacía presión en tú herida.

–Resiste linda, la ayuda viene en camino. Solo aguanta un poco más.–Te dijo con el miedo evidente en su voz.

–Esta vez no voy a volver...–Susurraste débilmente, mientras comenzabas a botar sangre por la boca.

–No... no digas eso... solo resiste...–Te dijo con voz temblorosa sin poder contener las lagrimas, haciendo presión en tu herida.

–Clint... mírame.–Le dijiste posando tu mano en su mejilla, manchándole con un poco de sangre, a la vez que le acariciabas el rostro, ofreciéndole una débil sonrisa.–Está bien... todo está bien...