Nanatsu no taizai: La guardiana

2 Capítulo 6

Decir que antes éramos la familia feliz sería mentir, pero sí éramos una familia funcional. Los cuatro nos la pasábamos entrenando y peleando.

Meliodas y yo lo hacíamos por seguir las órdenes de papá.

Zeldris lo hacía por un motivo que desconocía hasta cierto suceso y que no entendía hasta otro cierto suceso.

Estarossa lo hacía por mí.

Estarossa: Soy un inútil.

________: Si les haces caso a todos los que se burlan de ti entonces empezarás a serlo.

Estarossa: ¿Algún día podré ser tan fuerte como tú y Meliodas?

________: Por supuesto, no tengo dudas de ello. Ahora, ¿por qué no entrenamos un poco?

Estarossa: Sabes que no sería capaz de levantar mi arma contra ti.

Lo miré seriamente.

________: Tal vez eso tenga que ser lo primero que debas cambiar.

…

Meliodas: Perdóname…, no pude salvarte —dijo a 106 que estaba pereciendo frente a él.

Un día lluvioso, un reino destruido y él al borde del colapso. Todo eso provocado (menos la lluvia) por un demonio: Fraudin.

Liz: No llores… Volveremos a vernos…

Abrí los ojos. Estaba en el suelo. Me levanté lentamente sobando mi hombro por el golpe y solo vi a mi hermano manoseando a 107 como de costumbre. Ella se lanzó a abrazarlo lastimando nuestra herida.

Elizabeth: No sé qué hubiese hecho si no despertaba —decía entre un molesto llanto—, estaba tan aterrada.

Meliodas: Ya, no llores, Elizabeth.

Rodé los ojos y me cubrí con la cama. Aún estaba desnuda.

________: ¿Podrían dejar de toquetearse y darme mi ropa?

Elizabeth: ¡Señorita ________! —se soltó de mi hermano— Por el momento están lavando y remendando su ropa, pero le conseguí esto —me tendió unas prendas.

Un vestido simple de color amarillo y ropa interior. ¿Qué podía esperar?

________: No esperes que te agradezca —tomé la ropa de mala gana y comencé a vestirme—. ¿En dónde estamos?

Elizabeth: En el castillo de Camelot.

Meliodas: ¿Y los demás?

Elizabeth: Por acá. Los ayudaré a ambos.

________: A mí no me toques. —Me levanté una vez ya vestida—. Yo puedo sola.

Meliodas: Yo si necesito tu ayuda, Elizabeth, me duele todo.

________: ¡No es cierto!

Meliodas: Tú no dirás nada.

________: Que aprovechado.

Los tres nos dirigimos a otra habitación. 107 estaba ayudando a Meliodas a caminar y él aprovechaba para manosearla. Ya ni siquiera me sorprende.

Arthur: Seguro que Merlín ya perdió todas las esperanzas que puso en mí. —Alcanzamos a escuchar cuando estábamos en la puerta.

________: ¿Por qué no le preguntas a ella personalmente?

Arthur: ¡Señorita ________! —se levantó rápidamente hasta quedar frente a mí— ¿Ya se siente mejor?