• Trozo de Luna • [Itachi Uchiha]

47. Hogo

T/N, sintiendo el frío penetrar en sus huesos, decidió refugiarse dentro de una de las casas abandonadas. Al entrar, una nube de polvo la hizo toser y cerrar rápidamente la puerta tras de sí, decidiendo que sería mejor dormir al aire libre. Itachi la observaba en silencio mientras ella buscaba un lugar en el suelo para acurrucarse y descansar.

En medio de la calle vacía, T/N se tendió en el suelo y sintió cómo el frío del suelo se filtraba a través de su ropa. Para su sorpresa, notó que Itachi se acomodaba a su lado, compartiendo el mismo espacio en silencio. A pesar de la incomodidad del entorno, T/N encontró cierto consuelo en la presencia tranquila de Itachi.

Decidiendo no romper el grato silencio que los envolvía, T/N cerró los ojos y dejó que el cansancio la venciera, permitiendo que el sueño la envolviera lentamente.

T/N despertó de golpe, sobresaltada por la sensación del agua empapándola por completo. Abrió los ojos en medio de la oscuridad y se encontró con la lluvia torrencial golpeando el suelo a su alrededor con fuerza implacable. Se incorporó rápidamente del suelo embarrado, sintiendo el frío penetrar en sus huesos mientras el agua la empapaba sin piedad.

—¡Itachi, despierta! ¡Tenemos que movernos ahora! —exclamó, agitando a Itachi con urgencia.

Con gestos rápidos, T/N sacudió a Itachi de su sueño, llamándolo a la acción sin pronunciar una palabra. El tacto de su mano sobre la suya fue instintivo, una búsqueda de apoyo mutuo en medio de la oscuridad y el caos de la tormenta. Juntos corrieron hacia la casa principal, sus pasos resonando en la noche mientras el agua arremolinaba a su alrededor.

Al entrar, el polvo se levantó en una nube densa, pero la urgencia de encontrar refugio superó cualquier molestia. T/N sintió la mano de Itachi aún entre las suyas y, con una disculpa nerviosa, la soltó, consciente de la peculiar intimidad de su gesto.

—Lo siento, ¿estás bien? —preguntó, preocupada por su bienestar.

En la penumbra de la casa, encontraron un rincón donde refugiarse del aguacero, pero el frío seguía calando en sus huesos.

A pesar de la oscuridad, T/N no percibía la presencia de Itachi a su lado, hasta que unos brazos cálidos la rodearon y su bata fue gentilmente colocada sobre sus hombros.

—Esto te mantendrá caliente —dijo Itachi, mientras la cubría con la manta.

La sensación de calor y seguridad que emanaba de Itachi la reconfortó, y sin pensarlo dos veces, se dejó envolver por la calidez de su abrazo. Su cabeza encontró el reposo en el pecho de Itachi, escuchando el ritmo constante de su corazón latiendo en la oscuridad.

A pesar de la tensión del momento, T/N trató de no dejar que la ilusión se apoderara de ella, recordando que esta era una situación práctica para combatir el frío. Sin embargo, el latido acelerado de su propio corazón no podía ignorarse, y mientras se acomodaba junto a Itachi, una chispa de algo más que mera supervivencia encendió su interior.

T/N se hallaba sumida en un mar de nerviosismo, con el corazón latiendo con fuerza en su pecho mientras permanecía entre los brazos reconfortantes de Itachi.

—Itachi-kun... —susurró, intentando encontrar las palabras adecuadas para expresar su desconcierto.

Él la calló con un suave "Shh", y en respuesta, T/N sintió cómo el abrazo se volvía más fuerte, como si fuera un refugio en medio de la tormenta.