El siguiente recuerdo, lo sorprendió... ¡era su príncipe!... bastante molesto...
- ¡Vengo a que me expliques!... ¿qué son esas estupideces que le dijiste a tu esposa?...
-¿Yo... a Milk?...
¡¡El recuerdo se vió abruptamente interrumpido!!
- Ehh, yo lo siento, es que... esta técnica es agotadora...- se disculpó Gokú.
Ráditz hizo un gesto de asentimiento.
Pero, la verdad era... ¡que Gokú no supo cuál de las realidades iba a ver Ráditz! y, temeroso de que viera la primera versión de los hechos, deliberadamente cortó la conexión.
Ambos se quedaron en silencio, Gokú intentando calmarse, ¡pues estuvo a punto de mostrarle a Ráditz su obscuro secreto!... el cuál, en ese momento decidió.... ¡nadie sabría!
Mientras tanto Ráditz, trataba de asimilar toda la información recibida, pues había muchas cosas que lo tenían sorprendido...
¡¿Su príncipe había tenido un hijo con una terrícola?!... y si ella era tan importante para él... ¿dónde estaba?... ¿ya no lo era?...
¡Le impactó ver a su príncipe convertido en un poderoso ssj!... entendió perfectamente sus dudas...
El creer que ser un asesino era su destino, el pensar que dejar de serlo era traicionar su legado sayayin, esa extraña sensación de no pertenecer realmente a ningún lado...
«¡Lo entiendo más que nunca su majestad!» pensó.
Pero, de repente cayó en la cuenta de algo...
- Kakaroto... te agradezco que que hayas compartido tus recuerdos conmigo, he aclarado muchas de mis dudas pero.... aún no sé la respuesta de mi pregunta inicial.
-¿Tu pregunta inicial?...- dijo Gokú sin recordar exactamente cuál era.
-Sí... si tu no lo marcaste... ¿quién lo hizo?