YOVANA MONTECARLO
Apago el despertador y voy al baño. Me pongo el uniforme y tras hacer mi cama cojo mi mochila. Desayuno y subo al auto junto a mi hermana. Nos despedimos del chofer y bajamos al mismo tiempo que llegan los chicos. Hoy Daniel vuelve al instituto y al parecer todas las chicas están contentas con la noticia.
-Toca Física y Química, laboratorio.
-¿Nos ponemos juntas?
-Me temo que no, el profesor quería hacer cambios.
-Mientras no me toque con alguna de las que yo se vamos bién.
Caminamos hasta nuestras taquillas. Dejo la mochila y cojo las cosas que usaré. Mi hermana se adelanta ya que mi taquilla no cierra. Cuando lo consigo voy al laboratorio y antes de entrar choco con alguien, y caigo al suelo. Levanto la cabeza y veo a Daniel, el sonríe y me tiende su mano. La acepto y cuando estoy en pie me agacho para coger mis cosas del suelo, el me ayuda.
-Lo siento, no miraba.
-No pasa nada. –Sonrío.
-Tienes una sonrisa muy bonita.
-Gracias. –Me sonrojo.
-Oye ¿haces algo el sábado?
-Supongo que me quedaré en casa.
-¿Te gustaría ir a la fogata conmigo?
-¿Cuál fogata? –Río.
-Una que se organiza después del partido. Es solo para jugadores y sus acompañantes.
-No se si ese sea mi ambiente, hay alcohol, peleas...no lo se.
-Prometo no separarme de ti en toda la noche. Llegarás sana y salva a casa.
-Esta bien, iré. –Sonríe y río.
-Perfecto, ahora entremos o no saldrán por nosotros.
Asiento y entramos a clase. Las mesas son de dos y están esparcidas por toda la clase. El profesor nos indica que nos pongamos juntos, pues ya están todos emparejados. Suspiro al darme cuenta que frente a nosotros están Sergio y Sandra, una pelirroja explosiva con la falda corta como un cinturón ancho. Nos sentamos y empezamos a trabajar.
-¿Entonces tu vivías en Barcelona con tu padre?
-Si, cuando se divorciaron yo me fuí con el y Zaira se quedó con mamá.
-Debió ser duro alejarte de ellas.
-Mucho, ellas y mi padre son lo mas importante para mi.
-¿Tienes mucha confianza con Zaira? -Asiento. -¿Y os contáis todo?
-¿Ha dónde quieres llegar?
-Necesito respuestas. Mi memoria esta vacía, necesito que me cuentes todo.
-¿Y por que yo?
-No lo sé, pero siento que tu jamás me engañarías. Solo me fío de Jesús, de nadie más.
Sandra se acerca a el y se engancha a su cuello. Suspiro y miro mi libro, no soporto a esa chica, es demasiado irritante. Daniel habla con ella, no tendrá memoria peto sigue siendo un ligón sin fin. Camino hacía la mesa de Jesus y mi hermana para contarles.
-No tiene nada de malo que sepa lo que ocurrió.
-Pero Dani quiere vengarse.
-Una cosa es que no le digamos nada de lo que "tenía" con Yovana, para que no sufra por lo de la boda y otra es que le quitemos todos sus recuerdos.
-¿Daniel ya sabe todo?
-Si. Ya sabe que debo casarme contigo.
-Tiene que haber una forma de parar esa boda.
-La hay, pero no se que es peor. Si yo no me caso con Yovana, Daniel tendrá que casarse contigo y embarazarte antes de los 18.
-¿Qué vamos a hacer?
Se miran entre ellos y suspiro. Miro hacia atrás y veo a Daniel, esta haciendo las mezclas y Sandra ya no esta. Pienso en contarles lo de la fogata, pero no lo hago. Vuelvo a mi sitio y me siento. La clase termina y recogemos.
-¿Almorzamos juntos?
-No puedo.
-Claro te sentarás con tus amigos.
-No es por eso. Tu te sientas con los del equipo de fútbol y con las porristas, yo con mis amigas.
-¿Te importa si me uno a vosotras?
-Para nada, te estaré esperando.
Vamos a nuestra siguiente clase. Al terminar dejamos todo en las taquillas y caminamos hacia la cantina. Todos se sorpreden cuando Daniel se sienta conmigo y no con su grupo habitual.
-Daniel Oviedo ¿tu por aquí?
-Yo, eh, no se quien eres.
-Ellas son Maria, Rosa, Nay, Inés y Aida, mi prima.
-Me alegro de verte ya recuperado.
-Gracias.
El timbre suena y subimos las escaleras. Llegamos al segundo piso, toca matemáticas. Al pasar por el baño tiran de mi hacia dentro y veo a Sergio.
-Dile a Daniel que yo no me ando con tonterias y que lo que quiero lo consigo. Que se ande con ojo.
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Dos Almas Y Un ¡Te Odio! ©
Teen FictionYovana es una adolescente de dieciséis años, alegre y muy risueña. Sus padres se divorciaron hace unos años y ella se fue con su padre a Barcelona, mientras que su hermana gemela; Zaira, se quedó en Sevilla con su madre. Antes de marcharse a Barcel...